¿Caerá Kobani?

Los kurdos que habitan la ciudad siria de Kobani –situada al norte de Siria y fronteriza con Turquía- libran una durísima batalla contra los milicianos del Estado Islámico (EI) desde hace unas cuatro semanas. A pesar del apoyo de los ataques aéreos de EEUU contra los yihadistas en Kobani, todo indica que los kurdos no resistirán por sí solos esa batalla.

Los yihadistas ya han conquistado un tercio de la ciudad a pesar del bombardeo norteamericano contra objetivos del EI en Kobani. El terror sigue implantándose contra la los civiles atrapados en Kobani. Un video del EI mostraba el viernes pasado la decapitación de una mujer soldado kurda. La guerra contra el EI ha producido un masivo éxodo de la población hacia Turquía y ha incrementado la crisis humanitaria en la frontera turca.

En este escenario se dan varios elementos claves del conflicto internacional. De caer Kobani en manos del EI, y a pesar del apoyo de los bombardeos aéreos norteamericanos, el Departamento de Estado tendría que examinar la efectividad de la estrategia aérea sin apoyo de tropas terrestres. Estados Unidos está resuelto a no enviar tropas estadounidenses contra el EI. Washington procura tapar el desequilibrio estratégico presionando al gobierno de Ankara a enviar tropas turcas a la zona fronteriza. El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sigue negándose sin la condición de una zona de exclusión aérea y una línea de contención en la frontera.

Turquía considera irreal el que el ejército turco enfrente en solitario una lucha contra el EI en suelo sirio. Por su parte el gobierno de Damasco se opone rotundamente a la incursión terrestre en su país. El representante de la OTAN, Jens Stoltenberg, junto a otros delegados de EEUU mantendrán reuniones urgentes esta semana en Ankara. Mientras tanto los kurdos sostienen una lucha casi suicida en Kobani contra el EI.