España: entre lo conocido y el cambio

Las elecciones municipales y autonómicas que se realizan hoy en España se convertirán en un examen político no solo del gobierno de derecha de Mariano Rajoy, sino también medirá el desempeño como oposición, en particular del PSOE. Pero el que dará la tónica entre lo conocido o el cambio es Podemos. Analistas españoles consideran que los resultados en los municipios de Madrid y Barcelona el examen más difícil de la fuerza política emergentes, ya que Podemos no aspira a constituirse en el partido ‘bisagra' pues tiene la mira puesta en los escaños parlamentarios en el futuro. El mapa político español podría poner en jaque el agotado bipartidismo de los últimos años, pese a la gran estabilidad lograda, la madurez de los gobiernos locales, la seguridad jurídica; y el pleno derecho de las libertades ciudadanas. Y será el voto ciudadano el que decidirá las opciones que desea.

Las imprecisiones que dan los sondeos están a la orden del día. Aunque la mayoría de ellos auguran un fuerte ascenso de Podemos en estas elecciones. En España, como en tantos otros países europeos, el multipartidismo, tan necesario en una democracia pluralista, no ha transitado lo necesario para garantizar estabilidad ante la crisis económica actual. Muy por el contrario, el bipartidismo acentúo la rigidez de las opciones que propuso como solución el FMI y el Banco Central Europeo, que dejó desprotegida a la población ante acreedores bancarios que, con el aval del Estado español, practicaron el despiadado desahucio inmobiliario y mantiene una cifra de un 23% de desempleo. Ante el año electoral el Partido Popular de Rajoy emprendió una campaña de contención de la rabia e indignación nacional exaltando los indicadores de la economía que muestran una leve mejoría, pero no lo suficiente para mejorar la oferta laboral.

Las elecciones se dan en un contexto complejo pues se producen tras el controvertido enfrentamiento con las fuerzas nacionalistas catalanas que forzaban a una peligrosa fractura territorial y en medio de la crisis que aún no se ha resuelto, cambios monárquicos precedidos de escándalos por corrupción en la Familia Real, el PSOE estrenando liderazgos y Podemos con un lado oscuro que nadie conoce. En unas horas sabremos cómo pinta el panorama.