La líder opositora de Bangladesh, encarcelada por corrupción

Actualizado
  • 08/02/2018 12:00
Creado
  • 08/02/2018 12:00
La que gobernó el país en dos ocasiones (1991-1996 y 2001-2006), ha defendido reiteradamente su inocencia

La ex primera ministra y líder de la oposición de Bangladesh, Khaleda Zía, fue condenada hoy a cinco años de prisión por corrupción, en una sentencia tildada de "política" por su partido, que ya ha anunciando manifestaciones en las calles para los próximos días.

En medio de una gran tensión y tras llegar al tribunal especial de Dacca que la juzgó rodeada de miles de seguidores, la líder del Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP) fue encontrada culpable de haberse apropiado de 21 millones de takas (unos 200.000 euros) del Fondo de Orfandad Zía creado para financiar un orfanato.

Ya antes de la vista los militantes del BNP que rodeaban el vehículo fueron contenidos con gases lacrimógenos por las fuerzas de seguridad, movilizadas desde ayer en diferentes puntos del país en previsión de incidentes.

Pero nada de ello impidió que el tribunal especial de Dacca declarase culpable a Zía, líder opositora desde que en 1981 su marido, el general Ziaur Rahman, expresidente y una de las figuras centrales en el nacimiento de Bangladesh tras la guerra de independencia de 1971, muriera en un golpe de Estado.

La instancia condenó, además, a 10 años de prisión al hijo de Zía, Tarique Rahman, vicepresidente del BNP, y a otros cuatro acusados.

La mujer que gobernó el país en dos ocasiones (1991-1996 y 2001-2006), ya en la vieja presión Central de la capital bangladesí, ha defendido reiteradamente su inocencia y ha asegurado de que se trata de una causa política orquestada por el Gobierno de su enemiga declarada Sheikh Hasina.

A pesar de ello, las primeras palabras de su abogado, Masud Ahmed, tras la sentencia fueron para trasladar un mensaje de calma de Zía a sus seguidores. "Sean pacientes", dijo el abogado en nombre de la ex primera ministra, al afirmar que ella ha pedido a todos que se respete la ley.

El letrado tildó el proceso de "juicio político" y afirmó que no se hizo "justicia", por lo que presentará un recurso contra el veredicto la próxima semana.

El partido estaba preparado para este escenario, según indicó en rueda de prensa el secretario general del BNP Mirza Fakhrul Islam Alamgir, al asegurar que ayer consultaron con Zía los pasos a seguir en caso de que fuera declarada culpable.

"Nos dijo que no anunciáramos ningún programa extremo y protestáramos pacíficamente", dijo.

"Por instrucción suya estamos anunciando una manifestación en todos los distritos y subdistritos y Dacca para mañana, después de la oración (del viernes) y una protesta en todo el país para el sábado", agregó.

Pese a la llamada a la contención, en la suroriental Chittagong al menos ocho policías resultaron heridos en choques con seguidores de la ex primera ministra, según confirmó a Efe el jefe de la comisaría apostada en el Hospital Universitario de la ciudad, Jahirul Haque.

"Cinco policías fueron ingresados en el hospital, mientras que otros tres recibieron primeros auxilios. Ningún manifestante herido vino al hospital", afirmó la fuente.

Los enfrentamientos en Chittagong se saldaron también con la detención de al menos una docena de militantes del BNP, dijo a Efe un portavoz de la Policía local, el subcomisario Jahangir Alam.

Zia tiene actualmente trece causas abiertas en su contra por corrupción, violencia y sedición, una situación que, según el BNP, afecta también a cientos de miembros del partido.

El BNP, ausente actualmente del Parlamento, boicoteó las últimas elecciones generales de enero de 2014, después de que la gobernante Liga Awami de la primera ministra, Sheikh Hasina, suprimiese la modalidad de Gobierno interino que en las últimas décadas se había utilizado en el país para supervisar periodos electorales.

El BNP y la Liga Awami, partidos herederos de sendas figuras centrales de la guerra de independencia, se han alternado en el poder en el polarizado Bangladesh en los últimos 25 años, con la salvedad de un breve periodo de tutelaje militar.

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