Diputados, responsables del repudio ciudadano

La forma cómo se están aprobando las leyes en el pleno de la Asamblea Nacional es lo que ha hecho que el ciudadano medio sienta repudio hacia los diputados, en especial porque la actual administración habló de un cambio y éste no se ha visto, sostuvo hoy el perredista Manuel Bermúdez.

Si ahora los parlamentarios hablan de que durante el debate de la “Ley Langosta” se vieron obligados a cerrar las puertas porque estaba en juego su integridad física, es justamente porque no supieron hacer las cosas de cara al pueblo.

Si cada una uno de los códigos que se reformó se hubiera discutido a nivel de su comisión respectiva, permitiendo a los grupos civiles la participación directa, en lugar de aprobar las reformas todas juntas en un solo anteproyecto a tambor batiente como lo hicieron “el clamor popular hubiera sido más propositivo”, por eso responsabilizó a los diputados del ambiente de confrontación, intolerancia e inseguridad que se dio en el hemiciclo, “porque las personas estaban afectadas y molestas por las maneras”.

Tampoco se puede olvidar la forma como se presentó la Ley, pues a pesar de que trataba sobre la aviación civil tocó temas que nada tenían que ver con su materia original, “lo que generó el clima de disconformidad y ambiente de repudio por lo que estaban haciendo”.

La gente, dijo Bermúdez, siempre que se sienta afectada reclamará por sus derechos, pero “si los diputados venden sus proyectos como debe ser y explican a la gente de qué tratan las leyes, en qué consisten y cómo los va a beneficiar, les puedo asegurar que ese ambiente no se repetiría”.