Ávila sí se reunió con sindicalistas

El diputado opositor Leandro Ávila aceptó hoy en KW Continente que hace dos meses y medio se reunió con algunos dirigentes sindicales en Bocas del Toro, pero que esto ocurrió antes de que fuera sancionada la Ley 30. Explicó que la reunión obedeció a que existen líderes sindicales que pertenecen a su colectivo político, pero negó de plano que en esa reunión, que fue la única, se haya abordado algo relativo a la Ley 30 y mucho menos a acciones violentas en la región.

“El Gobierno lo que quiere desde ayer es cambiar la versión”, porque estas grabaciones que se le hacen al presidente del Partido Revolucionario Democrático (PRD), Francisco Sánchez Cárdenas, y que éste no ha negado, no son más que un anzuelo que el Gobierno intentó lanzar al grupo de oposición más fuerte en el país, porque antes que a Sánchez también le llamaron a él y al secretario General, Mitchell Doens. A él la persona que le llamó le dijo que les estaban tirando balas en Bocas del Toro y que necesitaban armas, a lo que Ávila no contestó nada y colgó el auricular.

“Yo recibo más de 100 llamadas al día por mi labor parlamentaria, pero se veía evidentemente que era alguien del Gobierno que nos quería hacer caer”, sostuvo.

Esto demuestra que la inteligencia y la seguridad del país en lugar de estar dedicada a cuidar a los panameños está volcada en “espiar a los dirigentes políticos del país”.

Concluyó denunciando que lo que todo el país debería tener presente ahora es que el Gobierno espía a la oposición, a los periodistas y a los sindicalistas violando la ley, porque por una situación similar este mismo Gobierno separó a la procuradora Ana Matilde Gómez, pero parece que “lo que es malo para ella es bueno para ellos”.