‘Como símbolo sagrado de nuestra nación’

CHIRIQUÍ. La bandera panameña nació con la separación de Panamá de Colombia. Mientras se consolidaba la acción separatista, María De La Ossa de Amador, junto con su cuñada Angélica Bergamota de De La Ossa y María Emilia De La Ossa, trabajaba en la confección del emblema que identificaría al país ante el universo de naciones. Es evidente que la mujer jugó un papel importante en esos momentos históricos, así como lo ha seguido haciendo en el desarrollo y progreso de esta República.

Inspirada en la valentía que llevó a estas damas a tan loable labor, Melva Rosa Gómez, una chiricana con experiencia en las labores de modistería, emprendió la tarea de confeccionar la Bandera Nacional y así dotar a los centros educativos e instituciones del distrito de David de un nuevo emblema tricolor.

Mientras se dispone a iniciar su singular trabajo en el Departamento de Desarrollo Social de la Alcaldía de David, donde labora, comenta que la idea surgió del alcalde de esta comuna, Francisco Vigil, quien en su visita por algunas escuelas y colegios se percató de que muchas de las banderas de estos planteles estaban deterioradas.

Inicialmente, se sorprendió con la propuesta que se le estaba haciendo, ya que entendía la gran responsabilidad que representaba.

La modista chiricana ya había confeccionado antes la Bandera Nacional, pero no con el rigor que se ha exigido en esta iniciativa, donde se ha cumplido a cabalidad con las medidas que demanda el pabellón, así como con los colores propios de este.

‘Es algo que me llena, porque es una importante contribución, máxime cuando los panameños estamos celebrando el mes de la patria’, sostiene mientras cose una nueva bandera.

Para Gómez con esta iniciativa se honra a este símbolo patrio, ya que, en los centros educativos e instituciones de este distrito, la bandera ondeará con sus colores vivos y resplandecientes y no opacados por el efecto de los años y de las condiciones climáticas; así como de los rayos solares.

Este proyecto ha requerido de esfuerzo y dedicación. Inicialmente, adquirir la cantidad de yardas de telas y en los colores patrios no fue fácil. Se tuvo que obtener las telas en diferentes almacenes de la localidad. ‘Queríamos un buen material para que aguantara las inclemencias del tiempo y que perdurara por mucho tiempo’, comentó Melva Rosa. Para cada bandera, se destinó cerca de cuatro yardas de tela. Explica que las medidas del pabellón ya están establecidas (72 pulgadas de largo por 48 de ancho), al tiempo que agrega que hay otra bandera que es más pequeña, cuyas medidas son 60 pulgadas de largo por 40 de ancho.