Chávez tardaría meses en volver

PANAMÁ. Siete días nos separan de la fecha crucial. El 10 de enero la ley venezolana establece el comienzo de un nuevo periodo constitucional, uno en el que Hugo Rafael Chávez Frías debe asumir como presidente de ese país según ordenó el pueblo en las u rnas el 7 de octubre pasado.

Pero más que el principio del periodo, la fecha resalta por el final que implica. Sí, ese día terminarán las especulaciones e incertidumbres y —para bien o para mal— el chavismo tendrá que hablar sin más rodeos acerca de la posibilidad de Chávez de asumir la responsabilidad de la presidencia de su país. Mientras eso sucede y la región se envuelve en expectativas, en Panamá dos opiniones de filosofías opuestas coinciden de manera determinante: el 10 de enero Chávez no podrá tomar posesión.

MIENTEN

El embajador de Panamá en la OEA, Guillermo Cochez, asegura que hace 23 días que Chávez no se levanta de la cama. ‘han estado mintiendo, por ejemplo el vicepresidente Maduro dice que pudo hablar con él, que lo vio haciendo ejercicios; el presidente Chávez desde el 11 de diciembre de la operación todo indica que no se para, que tiene paralizadas las extremidades inferiores, que su columna ha sido afectada por el tumor. No puede hablar luego de la traqueotomía que le efectuaron para poder respirar, y todo parece que se fue agravando’.

Cochez insiste en que la intención ha sido manipular a la población en las elecciones de octubre pasado.

LARGA CONVALECENCIA

El oncólogo Fernándo Cebamanos, también dirigente de izquierda y afín al chavismo, desestima los diagnósticos a los que se refiere Cochez. ‘Son puras especulaciones’, dice. Pero como médico admite que las posibilidades son críticas.

‘¿Qué le hicieron a Chávez? Nadie lo puede afirmar, es posible que una cirugía en la pelvis que tiene muchas complicaciones, de la cual se puede salir como se puede morir’, explica con serenidad.

‘ El tiempo de recuperación no puede ser corto. Mínimo un par de meses, y si sale mal puede ser terrible’, agrega Cebamanos.

El médico elevó sus deseos como científico y como ser humano de que el mandatario se recupere, ‘pero sí hay una morbilidad y una mortalidad muy grande en este tipo de operaciones’, reconoció.