‘El sonado discurso de Pinilla’

El discurso del magistrado presidente del Tribunal Electoral, Erasmo Pinilla, ha dado mucho que hablar. Hay quienes piensan que si se cumpliera con las recomendaciones del magistrado, se vivirían mejores días en Panamá.

En el acto de entrega de la credencial al presidente electo, Juan Carlos Varela, Pinilla hizo reflexiones que calaron en los presentes y en quienes lo veían o escuchaban a través de los medios de comunicación, que además expresaban sus impresiones a través de las redes sociales.

‘Nuestro pueblo soportó estoico, valiente, decidido y en silencio, la avalancha infructuosa de indolentes argucias de los políticos, campañas sucias, y hasta cuatro leyes hechas a la medida para tomar ventaja de todos los adversarios’, sintetizaba el magistrado pensando en los avatares a los que se enfrentaron los panameños en este quinquenio.

Como discurso, fue una verdadera pieza de oratoria, cargada de valores y describió algunas situaciones que se viven en Panamá, pero no para un magistrado del Tribunal Electoral, opinó el analista Edwin Cabrera.

Dijo lo que algunos no querían escuchar, pero como magistrado del Tribunal Electoral, no debió pronunciarse, ¿cómo quedaría en el caso de que tenga que ver como magistrado algunos de los temas a los que se refirió?, concluyó Cabrera.

No se equivocó,sin embargo, en decir que las elecciones que acaban de pasar generaron gran expectativa y alegrías en los ciudadanos, señaló el analista.

Esmeralda de Troitiño, exmagistrada de la Corte Suprema de Justicia, opinó que Pinilla va, más allá de los intereses vanos o vacíos de algunos políticos por llegar al poder. Añadió, en ese sentido que cuando se le pone fe a algo ‘hay empeño y la búsqueda de hacer las cosas mejor, sin ser cegados por el dinero y el poder’.

PUNTOS IMPORTANTES

Troitiño destaca que Pinilla hizo especiales planteamientos, en una pieza llena de patriotismo y compromisos con la institucionalidad a la que hay que sacarle mayor provecho, como la necesidad de una nueva y mejor constitución que involucra mejorar el sistema político del país.

‘No solo se debe mejorar el sistema en los partidos políticos, sino también en el poder público’, dijo.

La exmagistrada agregó que ese punto también fue desarrollado con detenimiento por Pinilla a lo largo de su pieza, cuando pedía ponerle fin a una política criolla plagada de males como el clientelismo, el transfuguismo y otros tantos cánceres que carcomen a la sociedad.

Finalmente, se refirió al llamado que se le hizo al nuevo presidente a cumplir con sus compromisos.

DOS MENSAJES

Cada palabra contenida en el discurso de Pinilla parecía estar encaminada a convertirse en un grito de valentía. El verbo del magistrado hizo consideraciones, tanto para el gobierno saliente como el que dirigirá al país por los próximos cinco años.

‘Señor presidente, tiene una segunda oportunidad, haga buena su palabra’, exhortó Pinilla a Varela.

En ese orden de ideas, la exprocuradora y diputada electa, Ana Matilde Gómez, expresó que el discurso de Pinilla es un documento valioso ‘una pieza de oratoria importante’ que debe quedar registrada, más cuando ésta contiene un llamado a la conciencia del gobierno entrante de Juan Carlos Varela, a cumplir con el país.

Gómez también señaló que fue un llamado de atención al gobierno saliente. ‘Es una pieza que alberga lo que piensa el pueblo en este momento’.

Advirtió, que a pesar del descanso de una reelección disfrazada, aún hay temas pendientes, como el despilfarro de dinero en las campañas.

Precisamente, Pinilla hizo énfasis en la victoria de Gómez, quien ganó una curul en la Asamblea Nacional, por cociente, sin costosas campañas ni ninguna de las prácticas que criticó, aun cuando su candidatura por la libre postulación.

DISCURSO CON DEMANDAS

El discurso del magistrado se convirtió, para muchos, en una radiografía y en un reflejo de la sociedad panameña.

‘Ganó la voluntad popular por encima del bullicio y el clientelismo’, sentenció Pinilla.

Maribel Jaén, de la Comisión de Justicia y Paz, afirmó, por su parte, que el discurso contenía las demandas de la población frente al proceso electoral.

Recalcó, entre otras cosas, que es evidente el hastío en los ciudadanos por la saturación de propagandas y por el estilo de algunos políticos.

‘La experiencia de Pinilla le permitió dar consejos y recomendaciones para que no se cometan los mismos errores, no solo iba dirigido a la clase política, también apuntaba hacia la ciudadanía’.

Lo expresado por el titular del Tribunal Electoral, al decir: ‘El presidente debe impulsar herramientas de consulta permanente con la sociedad’.

Jaén también apuntó aspectos importantes que mencionó el magistrado, como trabajar más en dirección de una democracia deliberativa, lo que contrasta con los rejuegos políticos que suele verse en tiempos electorales.

Apoyado en las palabras del mismo Varela, el día que ganó las elecciones, Pinilla insistió en que ese compromiso sea real.

‘Invito al presidente electo a verdaderamente trabajar con los mejores, no importa su bandera política’. Insistió el magistrado Pinilla , acerca de si el nuevo presidente vería su discurso como ‘una amenaza, una conminación o un consejo.’

Sin embargo, las palabras de Pinilla dejaron un sabor amargo en algunos sectores políticos. Su discurso no fue bien visto por el partido del gobierno saliente, Cambio Democrático.

El secretario general de este colectivo, Rómulo Roux, dijo que no le parece que este fuera el discurso que debía pronunciar un magistrado del Tribunal Electoral.

‘Felicitamos al Tribunal Electoral por el proceso democrático que se llevó, pero como CD no nos parece que el discurso fuera adecuado’.