Informes forenses confirman llamadas

La fiscal Primera del Circuito Judicial de Chiriquí, Betzaida Pittí, tiene en sus manos parte de los resultados de los análisis forenses realizados en el Instituto Holandés, que confirman el pedido de auxilio que trataron de hacer las holandesas Lisanne Froon y Kris Kremers antes de que se les perdiera el rastro, a finales de marzo pasado.

Según Enrique Arrocha, abogado de la familia Kremers, el informe traducido al español revela que las muchachas hicieron dos llamadas, al 112, número de emergencia en Holanda, y al 911, línea de auxilio en Panamá. Estos intentos jamás pudieron concretarse por falta de señal. La fecha en que las chicas pidieron auxilio aún no ha sido revelada. No obstante, son muestra del nivel de desesperación que pudieron haber vivido antes de que se dieran por perdidas.

La información se deduce del análisis realizado a los teléfonos celulares, un iPhone y un Samsung, que portaban las jóvenes durante el trayecto que recorrieron del tramo de El Pianista, un sendero boscoso ubicado en Boquete.

Arrocha conoció sobre estos informes después de que el embajador de Holanda en Panamá, Wiebe de Boer, le manifestara, por correo electrónico, que el Ministerio Público de Panamá le había confirmado que ya tenía en sus manos los resultados de los análisis forenses del Instituto Holandés que examinó las pertenencias de ambas holandesas.

Entre los artículos que revisó el instituto neerlandés se encuentran la cámara fotográfica y la mochila, objetos que se encontraron a orillas del río Culubre.

El abogado Arrocha también indicó que este viernes los moradores de la zona encontraron un nuevo hallazgo óseo que asemeja un fémur, pero éste todavía no ha sido analizado para determinar si tiene relación o no con las jóvenes de las que hasta ahora han aparecido un pie y un hueso de pelvis.

Desde hace una semana, las familias de las víctimas inquirían a las autoridades, tanto de Holanda como de Panamá, para que revelaran el resultado de las investigaciones forenses practicadas en su país, y así hallar más pistas que señalen las causas de muerte de sus hijas.

La indignación de las familias sobre la investigación de la fiscalía se evidencia en un comunicado de prensa de la familia de Kris, en el que cuestiona el secretismo de las autoridades con respecto a los análisis forenses. Según la nota, el Instituto Holandés debió haber finalizado el 7 de agosto, pero pasadas dos semanas, aún no se conocía el informe.

Por ahora, solo se tienen conclusiones parciales de estas pesquisas, pues no hay noticias de las pruebas forenses de la cámara y la mochila. Las familias holandesas han centrado sus esperanzas en que estos resultados aclaren qué línea de investigación seguir, criminal o accidental. Kris y Lissane desaparecieron el 1 de abril cuando recorrían el sendero, pero aún no se sigue una pista clara sobre su muerte.