‘Gringogate’ sin fecha

PANAMÁ. El “gringogate” de Bosco Vallarino podría convertirse en el caso más complejo al que se ha enfrentado el Tribunal Electoral en los últimos 20 años.

A poco más de 20 días para el cambio de gobierno, los magistrados del Tribunal Electoral aún no dan un fallo definitivo en un caso, que inició a mediados del mes de abril y, quetodavía mantiene en vilo a los involucrados.

Y mientras el alcalde electo recorre los pasillos del Palacio Municipal y planea el color de pintura para el que será su nuevo despacho durante el próximo quinquenio, las autoridades electorales se tiran de los cabellos antes de dar un fallo definitivo.

Al respecto, el vocero del Tribunal Electoral, Humberto Castillo indicó que el caso está caminando procesalmente. “El TE está paso a paso dándole seguimiento al tema. Está consultando las investigaciones que se están desarrollando en torno a ello”.

Castillo explicó que los magistrados del TE están a la espera de la respuesta de una solicitud que hizo el Registro Civil al Ministerio de Relaciones Exteriores para que la embajada de Estados Unidos le certifique si Bosco Vallarino ha obtenido la nacionalidad estadounidense. De ser así, desde que fecha y con fundamento en cuál de las opciones de naturalización prevista en la legislación federal de los Estados Unidos.

Concluyó que las autoridades electorales darán la decisión final del “gringogate” en el momento oportuno.

Pero parece que tanto aplazar el dictamen final del caso, ha complicado más el panorama para el Tribunal Electoral. A tal punto que hasta el actual alcalde Juan Carlos Navarro podría quedarse calentando un ratito más la silla principal del Hatillo. O en su defecto, el nuevo gobierno empezaría su gestión con Roxana Méndez como alcaldesa suplente, hasta se resuelva la situación del alcalde electo.

Por el momento, el alcalde capitalino Juan Carlos Navarro ha dicho que no le interesa seguir en el cargo después del 1 de julio.

Ni los especialistas en derecho constitucional se ponen de acuerdo respecto a cuál será el futuro de la Alcaldía de Panamá del nuevo gobierno.

Si podrá seguir Bosco como alcalde, si será Roxana, quien lo reemplace en el cargo, si Navarro quedaría en el cargo hasta que se llegue a una decisión o, si en última instancia se convoque nuevamente a elecciones para la comuna capitalina en la que participarían los mismos contendores, Miguel Antonio Bernal, Roberto “Bobby” Velásquez e incluso Roxana podría correr como candidata a alcaldesa.

El ex procurador de la Nación Rogelio Cruz manifestó que no es necesario que Navarro se quede en el cargo hasta después del 1 de julio. “El TE puede darle su credencial como vicealcaldesa a Roxana, ella no está siendo demandada”.

Cruz asegura que ese es el trabajo de un suplente, reemplazar en el cargo al principal.

Con él coincide el catedrático y especialista en derecho constitucional Pedro Fuentes, quien recalca que es Roxana, quien debe quedar en el cargo, por ser la suplente.

Fuentes agrega que toda esta situación se pudo evitar. “El TE no debió dejar correr a Bosco. El no podía ser candidato ni ser electo”.

Sin embargo, para el ex magistrado del Tribunal Electoral, Guillermo Márquez Amado la ley no es muy clara en un caso como éste.

Señala que aunque Roxana Méndez tiene la vía libre para reemplazar a Vallarino en el cargo, pues no hay impugnaciones contra ella; se estaría violentando la voluntad del electorado. “La Constitución habla del voto libre, universal, secreto y derecho, pero al imponer a alguien de carambola, ya no se está hablando de un voto libre. Los electores votaron por Bosco, lo eligieron a él”.

Márquez Amado añade que ahora al TE le llueve sobre mojado. “Es una situación que se pudo haber evitado si el TE hubiera decidido antes de las elecciones, pero lamentablemente no se resolvió a tiempo”.

En ese mismo sentido, Miguel Antonio Bernal indicó que no existe ley en Panamá que impida que Roxana Méndez quede al frente de la Alcaldía de Panamá. Bernal agrega que todo dependerá de la decisión de lo magistrados del TE.

Lo cierto es que Bosco Vallarino, por el momento, sigue siendo ciudadano estadounidense, aún no ha renunciado a ella. Aunque admitió que en cualquier momento podía renunciar a ser ciudadano “gringo”, han pasado dos meses y no lo ha hecho. Entonces sigue vigente el juramento que hizo en 1994. “Al aceptar la nacionalidad estadounidense renunció absolutamente y abjuró toda lealtad y fidelidad a cualquier príncipe, potentado, Estado o soberanía extranjera, de quien o del cual haya sido sujeto o ciudadano antes de esto”.

Por el momento Vallarino prefiere callar, tal vez esperando la decisión de las autoridades electorales.