La polémica sucesión

PANAMÁ. Ana Matilde Gómez llegó muy temprano al que sería un día largo y sumamente tenso.

Lo hizo por la puerta de siempre, la lateral, donde salió presurosa del vehículo que en los últimos cuatro años la condujo a la sede del Ministerio Público en la Avenida Perú.

Allí, Gómez pareció atrincherarse junto con dos de sus más fieles colaboradores, Rigoberto González, secretario general del Ministerio Público, y el fiscal Luis Martínez, a quien la hasta ayer Procuradora había designado como su reemplazo, pero que no pudo ocupar la silla principal.

A media mañana, Gómez recibió la esperada notificación, permitiendo a los medios de comunicación apreciar como estampaba su firma en el documento.

Con rostro firme, pero evidentemente afectado por la situación, firmó la notificación e inmediatamente anunció que pediría la reconsideración de la medida.

Pero el pedido de Gómez, ahora Procuradora Separada, no surtió efecto alguno.

La reconsideración fue resuelta por el magistrado Wilfredo Sáenz, quien en su ponencia solicitó acoger el pedido de separación e impedimento de salida del país contra Gómez.

En un tiempo que Usain Bolt, considerado el hombre más rápido del mundo, habría sido mirado con cierta envidia, Sáenz desestimó por “improcedente” el recurso presentado por Gómez.

Rigoberto González, principal colaborador de la separada procuradora, intentó un nuevo movimiento, sin éxito alguno; de esta forma, el camino se allanaba para la entrada de Giuseppe Bonissi, quien la noche del jueves había sido confirmado como Procurador Suplente, reemplazando temporalmente a Gómez.

Al Ministerio Público también llegó el máximo dirigente de la Cruzada Civilista Aurelio Barría.

Mientras en la Avenida Perú había alta efervecencia, en el Casco Antiguo reinaba la tranquilidad. En el Salón Amarillo de la Presidencia de la República, Giuseppe Bonissi asumía la suplencia de Ana Matilde Gómez, con la firma de su nombramiento, en presencia del presidente Ricardo Martinelli.

Fue una ceremonia privada donde solo asistieron unos pocos familiares y amigos del ahora jefe del Ministerio Público.

La media tarde supuso la llegada del nuevo procurador al despacho superior. Antes, unidades del Servicio de Protección Institucional (SPI), realizaron una especie de transición, en las que las unidades que sirvieron de escolta a Gómez dejaban a nuevos custodios para Bonissi.

El nuevo jefe del Ministerio Público llegó acompañado de quienes ya había anunciado como parte de su equipo de trabajo, para una reunión de transición con Gómez.

El encuentro fue más breve de lo que se habría podido pensar, ya que poco más de una hora después, Ana Matilde Gómez apareció por la puerta principal del Ministerio Público para retirarse.

Gómez, salió de la Procuraduría acompañada por su esposo, su secretaría de prensa Gioconda Emiliani y su Secretario General Rigoberto González.

Al mismo tiempo en que se retiraba Ana Matilde, Rigoberto González, presentaba su renuncia al cargo.

Al parecer, no todos los que llegaron la tarde de ayer a la Procuraduría para ver como su amigo Giusseppe Bonissi, ahora Procurador Encargado, tomaba posesión de su cargo pudieron subir al nuevo despacho. Allí se encontraban allegados como Jorge Ramón Váldes su asesor, Neftalí Jaén, Zulay Rodríguez, Leonel Blaisdell, David Genderson Mora y su nuevo Fiscal Auxiliar Giovanni Olmos.

uego de la despedida de Gómez con los medios de comunicación, solo quedaba esperar las palabras del Bonissi, quien atendió a la prensa a las 6:45 de la noche, donde pidió nuevamente paciencia y dio a conocer algunos cambios que se dieron luego de asumir el poder del Ministerio Público.

Anunció que el fiscal Luis Martínez, fue trasladado como Fiscal Superior en la provincia de Chiriquí.

Que el reemplazo de Rigoberto González en la Secretaría General será Nedelka Díaz mientras que la secretaria de Comunicación Gioconda Emiliani seguirá en su cargo.

El Fiscal de Drogas Edwin Guardia pasó a la Fiscalía Segunda Superior y la Fiscal Geomara Jones, fue trasladada a la Fiscalía Primera Superior.

Mienttra que el Fiscal Williams Parodi, fue trasladado ala fiscalía Segunda de Drogas.

Al final, Bossini exclamó: “dejenme trabajar”.