Lavitola pretende regresar a Panamá

El empresario de origen italiano, Valter Lavitola, involucrado en el escándalo que se generó tras la contratación hecha durante el gobierno de Ricardo Martinelli con la empresa Finmeccanica está por concluir sus condenas en los próximos meses y pretende regresar a Panamá.

Rodrigo Sarasqueta, quien es abogado del italiano en Panamá informó que el empresario está en disposición de regresar a territorio panameño con el fin de ‘limpiar su imagen'.

Sarasqueta, fue jefe de seguridad del expresidente, Ricardo Martinelli y en los últimos meses ha viajado en varias ocasiones a reunirse con su cliente en Italia.

Lavitola, quien residió en Panamá mientras se hacían las transacciones, purga varias condenas en su país y goza en estos momentos de una medida cautelar de casa por cárcel otorgada por los tribunales italianos, después de haber cumplido la mayor parte de sus penas.

Durante su estadía en Panamá, Lavitola tuvo un hijo con la panameña, Karen De Gracia, razón que también lo motiva a regresar a territorio panameño.

CONDENAS DE LAVITOLA

Lavitola, quien llegó a Panamá de la mano del magnate y exprimer ministro Silvio Berlusconi, está detenido desde abril del año 2012 y fue procesado por varias causas penales en su contra.

Se le condenó por la extorsión a la empresa Impregilo.

También purga una condena, tras ser condenado por corrupción internacional por el supuesto pago de coimas a favor de políticos, en varios países, entre ellos, Panamá a cambio de que beneficiaran al conglomerado Finmeccanica con contratos del Estado.

Otra de las condenas a Lavitola, se relaciona con la desviación de $20 millones a cambio de la contratación de cárceles modulares con la empresa Svermark, contrato que no se llegó a pactar.

VERSIONES DE LAVITOLA

Según informó Sarasqueta, hay una serie de versiones que se han divulgado en Panamá que no son ciertas.

Según Sarasqueta, entre otras cosas, Lavitola le ha informado que en el año 2011, durante una visita de Ricardo Martinelli a Italia, el entonces vicepresidente de la República, Juan Carlos Varela, estuvo ‘negociando' a espaldas del primero la compra de dos aeronaves modelo C-27, fabricados por la filial de Finmeccanica Alenia Aermacchi.