Así lo confirmó el viceminsitro de Finanzas, Fausto Fernández, a La Estrella de Panamá
- 11/03/2021 11:48
Encierro y 'toque de queda' injustificados
Al cumplirse un año desde que se conoció el primer deceso por causa de la pandemia del SARS-CoV-2 en Panamá, se puede afirmar que el tratamiento de la crisis en la perspectiva médico/sanitaria/epidemiológica en general, ha sido positiva. Sin embargo, no se puede decir lo mismo, en materia socio-económica, lo que a mi juicio, es evidentemente desastrosa.
En primer lugar, un encierro absurdo y un toque de queda descabellado, además de violatorio de los derechos constitucionales fundamentales de todos los panameños; no han arrojado resultados epidemiológicos de contención de la COVID-19 que hayan validado -en ningún momento- estas medidas.
Por otro lado, decidida la "hoja de ruta" gubernamental de la pandemia, la misma no fue acompañada de decisiones para sobrellevar la crisis social, por ejemplo, poniendo dinero en manos de los trabajadores y pequeños inversionistas desprovistos de sus ingresos, a objeto de no afectar tan grave y dramáticamente las actividades comerciales.
En este sentido los financistas y economistas recomendaron, desde un principio, un monto de asistencia monetaria para los trabajadores de contratos suspendidos y de "cuentapropistas", mucho mayor que la otorgada por la administración Cortizo/Carrizo.
El resultado de los desaciertos socioeconómicos ha sido el mayor desplome de la economía (18%) en la historia de la República. Tampoco el gobierno no ha podido justificar el altísimo endeudamiento que ha incrementado la relación deuda/PIB de 47% a 62% lo cual, entre otras cosas, ha ocasionado una disminución del grado de inversión país, cuyo efecto podría ocasionar el aumento del costo del dinero y; la percepción del pueblo de que personeros del gobierno han incurrido en actos de corrupción en las compras y contrataciones públicas.
Finalmente, pero no menos importante, es el hecho cierto, que tanto el encierro como el "toque de queda" solo tienen una explicación lógica, esto es, los disparatados criterios de seguridad ciudadana recomendados por el sector militar de la Fuerza Pública. Insensatas, no solo porque en materia de seguridad pública la criminalidad no ha disminuido significativamente, sino porque ha creado una casta privilegiada -los miembros de los servicios de policía- muchas de sus unidades, en este período, "cebándose" en los cuarteles de policías o desempeñándose como seguridad privada.
En conclusión, no existe ninguna razón sanitaria válida para que se mantenga el "toque queda", como tampoco suspendidas algunas actividades económicas y cerradas las escuelas. ¡Así de sencilla es la cosa!
El autor es abogado y analista político.