• 06/02/2010 01:00

Día del fotógrafo

Un día como hoy, cubriendo una noticia en la capital de Costa Rica falleció el fotógrafo y camarógrafo de televisión Rogelio Martínez, a...

Un día como hoy, cubriendo una noticia en la capital de Costa Rica falleció el fotógrafo y camarógrafo de televisión Rogelio Martínez, a quien conocí desde pequeño, por ser un vecino que residía en calle Próspero Pinel a menos de cien metros de mi hogar. Además su hermano Marcos Hermoso es allegado de mi familia.

El mencionado amigo y compañero de profesión se inició en este campo cuando laboró bajó las órdenes del Ingeniero Luis H. Moreno en la Reforma Agraria, remota dependencia gubernamental. También trabajó en la Caja de Ahorros, cuando el gerente era el Licenciado Luis C. Pabón, para más tarde titularse como uno de los mejores de tal quehacer en Televisora Nacional.

Esta rama del saber ha contado con numerosas figuras pioneras, valientes e indiscutibles artistas. Puedo traer a mi memoria, algo marchita por mis casi ochenta años, a Rafael Peralta Ortega, Orestes Cabredo, Sánchez Durán, Emilio Gasteluz, Tomás Burbano, Manuel “ El cojito ” Fernández, el viejo Langchaw, Tomás Fernández, Ruperto Miller, Rogelio e Ismael Achurra, Frank Sealy, etcétera.

El reportero gráfico es quien expone su integridad física en todos los instantes de cubrir un hecho noticioso; mientras que los periodistas consiguen permanecer ocultos sin comprometerse de alguna manera.

Las cámaras no se pueden esconder, deben permanecer al frente de los encargados de ellas. Muchos de mis colegas pueden dar testimonio del riesgo que implica la tarea. Entre ellos: Rolando Aizpú, Camilo Jipsión, Alberto Muschett, Rolando De Gracia, los hermanos Casís, y una pléyade de personas del fascinante y riesgoso oficio.

Hace algunas décadas el seis de febrero era celebrado con una santa misa en horas de la mañana, para luego tener un encuentro total entre una enorme cantidad de profesionales de la lente periodística.

El iniciador de la idea fue el Ingeniero Moreno, quien hasta en su propia residencia rindió homenaje póstumo a su antiguo subalterno. Más tarde este acto se trasladó a los salones de reuniones de los mejores hoteles y restaurantes de la ciudad capital.

Hace un par de años el Ingeniero Juan Carlos Navarro, ex alcalde del distrito capital, ofreció un excelente y opíparo homenaje a los amos de los aparatos fotográficos que tuvo lugar en la sede comunal. En esa ocasión fueron distinguidos con sendos pergaminos los más veteranos de esta rama noticiosa, y aún en el diario bregar.

Ojalá esta fecha sirva para renovar los votos de continuar, como hasta ahora, como los baluartes del acontecer diario en todo el ámbito de la nación. Pero no olvidando la protección imprescindible para seguir con vida para beneficio y seguridad de nuestros abuelos, padres, hijos y nietos.

Todo paso implica un riesgo, y más en esta faena muchas veces mal remunerada.

Hago un fervoroso llamado a los nuevos baluartes de la diaria misión para que se mantengan, como los antes dichos veteranos, al pie del cañón sin pedir ni dar cuartel, porque la gloria es de los osados sin importar la paga por la que arriesgan sus existencias.

Estoy seguro de que en el más allá, Rogelio pondrá su visto bueno a todo lo expuesto en este corto artículo. Porque nunca rechazó ningún encargo encomendado. Jamás habrá otro como él.

*Fotógrafo profesional.bravo.aristides@hotmail.com

Lo Nuevo
comments powered by Disqus