Nuestro sendero hacia la modernidad: 28 de Noviembre de 1821

Los pueblos hispanoamericanos habían sido introducidos de manera violenta y forzosa a la historia mundial en los inicios de la era moderna (1492 para algunos); nuestros ancestros habían sido eximidos de sus creencias y forma de vida, las cuales, hasta el momento de la expansión europea, existían en cada pueblo de este continente americano.

¿Qué hubo de acontecer para que nuestras naciones hermanas y la nuestra decidieran un día la independencia tres siglos después de la conquista?

Bien, diversos fueron los factores, entre ellos el descontento social, por un lado del pueblo llano, el cual no tenía acceso a puestos importantes de mando y que estaba siempre supeditado en forma servil a la Corona. Por otro, los privilegios exclusivos de los peninsulares sobre los ‘criollos ' hijos de españoles nacidos en el continente americano y no en España, conllevaba a un enfrentamiento constante, debido a que, como decía el dicho de aquella época: ‘Más vale un español pobre que un criollo hacendado rico '.

Socialmente y ello es importante identificarlo, todas las clases sociales y las personas que la conformaban en América estaban fuera de cualquier mando o poder importante en sus propias tierras. El rey estaba alejado en miles de kilómetros de esta región y las personas que encomendaban a regir el reino americano pues eran bastante indolentes y se prestaba para la corrupción. De ahí otro dicho en la época colonial famosísimo: ‘Las leyes se acatan... pero no se cumplen '; es decir, quien mandaba era un grupo de funcionarios peninsulares, los cuales anteponían el solo derecho de haber nacido en Europa para mantener dominada a toda la sociedad colonial.

En el plano internacional se da una serie de eventos que marca el fin del dominio de la monarquía española en América.

Primero las ‘Ideas de la Ilustración ' que se generan principalmente en Francia, en donde los escritos de filosofía política de Montesquieu, Rousseau, Voltaire y el inglés John Locke, su principal idea de este ‘siglo de las luces ', llamado así porque la razón sería como una lámpara en el mar sombrío de la ignorancia, era precisamente que la razón estaba para mejorar las instituciones religiosas, económicas y políticas y que el Gobierno era un contrato especial entre el gobernante y los gobernados.

Tales ideas gestadas en la Francia recorrieron el mundo occidental y en América tuvieron una gran repercusión, nadie que hubiese nacido en esta tierra americana y también en nuestro pequeño Istmo iba a contrariar los deseos y la filosofía de la Libertad política.

Inspirados en estos principios, nuestros primeros próceres actuaron primero con temor, porque cuando las gestas de independencia empezaron en América los ‘monárquicos ' realistas o visigodos, como también se les llamaba a los españoles, ultrajaron las pocas libertades de los patriotas, persiguieron y aniquilaron todo posible foco de resistencia, inclusive damas fueron ejecutadas por su participación en los movimientos independentistas. No debemos olvidar a Manolita Sáenz, compañera del Libertador Simón Bolívar ni a nuestra prócer Rufina Alfaro, ejemplos del valor de las mujeres.

Bien, esa situación de osadía y temor estaba, hasta que los santeños en primera instancia reclaman la libertad y luego don Mariano Arosemena completa la independencia utilizando el valor, la astucia y el temple para conseguir que la guarnición de los españoles, el Batallón Mano de Tigre, saliera de sus cuarteles rumbo a Cuba.

El 28 de Noviembre de 1821 Panamá entra en el sendero de las naciones de la modernidad, es cierto que aún habrá de seguir luchando, pero, como dijese el mismo Libertador Simón Bolívar, en nuestra independencia, nuestra acta era el documento más glorioso que puede ofrecer a la historia esta tierra más que alguna otra provincia americana.

Entonces, en una fecha más de las gesta del 28 de Noviembre de 1821, merece nuestra patria que trabajemos con fervor e hidalguía para hacernos merecedores de tan digno regalo de nuestros próceres.

Salud compatriotas.

DOCENTE EN FILOSOFÍA E HISTORIA.