Educación para trascender

Cuando el Gobierno de Ricardo Martinelli ganó las elecciones en el 2009, escribí que la nación ‘debiera comenzar a allanar el camino en la construcción de una sociedad que trascienda sus limitaciones socioculturales, con el objetivo de garantizar un espacio digno para todos '. Señalé que eran evidentes que ‘las trasformaciones profundas que tiene el objetivo de llevar al conglomerado social a un nivel de coexistencia superior, tomará más de un quinquenio. (...) veo significativas complejidades que a la vez provocan aprehensiones considerables. Inseguridad, juegavivo y un evidente deterioro en la conducta social y política '. Si eso es lo que pensaba antes de que el Gobierno de Martinelli tomara posesión, con lo que sabemos que ocurrió durante ese quinquenio hemos quedado mucho más preocupados.

A dos años del Gobierno del presidente Juan Carlos Varela, a pesar del optimismo de este, los peligros no parecen disiparse. Ha tenido graves problemas en reclutar a los mejores para servirle al país. El sistema de justicia (en donde tuvo la oportunidad de proponer a varios magistrados) nos ha hecho muecas a todos y la certeza de que los maleantes y corruptos paguen sus delitos, parece menos certera.

Hay un serio desconecte entre los que desde afuera —sumado a los adentro— solo miran los números, y los que observamos el país como un todo y la dinámica entre lo positivo y negativo. Jorge Familiar, vicepresidente del Banco Mundial, le dijo a Félix Ruiz Rodríguez de La Estrella de Panamá que ‘este es el país de la región que más está creciendo. ‘Lo vemos como el reflejo de una buena gestión', y añadió que están (el Banco Mundial) ‘comprometidos con el crecimiento y desarrollo de Panamá '.

Sin embargo, en el foro titulado ‘Mosaico de oportunidades ', un grupo de profesionales panameños de alto nivel, entre los que se encontraban el escritor Juan David Morgan, el obispo Julio Murray, Stanley Motta e Isabel de Saint Malo de Alvarado, vicepresidenta de Panamá, señaló que la educación es el principal problema que aqueja a nuestro país.

Después del emotivo fin de semana por la inauguración del Canal Ampliado muchas han sido las voces para que el Estado se concentre decididamente en el tema de la educación. Tan solo tres días después, los resultados en la Universidad de Panamá sugieren que ese interés se confirma y que en el marco de una nueva etapa administrativa universitaria, las políticas educativas sean redefinidas para aprovechar las oportunidades inmediatas y futuras. Esta sociedad está gravemente infectada de todos los males que pueden llevarnos a situaciones sociales peligrosas y solo es a través de la educación en que podremos darle forma a un nuevo ciudadano.

Mientras planificamos el siguiente gran proyecto, que requerirá de técnicos bien capacitados, debemos atender la parte humana del proceso de desarrollo y llegar a acuerdos a corto y mediano plazo para que las siguientes administraciones educativas, no solo se concentren en atender las necesidades técnicas o de infraestructuras del país, sino los de formación cultural y humanística. Deben ser planificados y consensuados como programas y mecanismos obligantes para su continuación a largo plazo para revertir la actual conducta social, política y cultural.

Debemos pensar siempre que la sociedad que queremos construir a partir de este momento, debe incluir políticas educativas visionarias, que sean extensivas a todas las regiones poblacionales del país; que garanticen participación y equidad para todos y que propicien el mejor clima posible para el desarrollo personal. Al fin y al cabo, el ambiente educacional adecuado y justo, permitirá un desarrollo humano más acordé con lo que se vislumbre deba llevarnos a trascender. Por las falta de atención a esta deficiencia, el país resiente seriamente lo ineficaz de un sistema educativo protervo y caduco.

Debo advertir la necesidad urgente de preservar y cuidar el ambiente para nuestro futuro. Muchos han desvirtuado el sentido de desarrollo con un afán por intervenir destructivamente con las bellezas y bondades que el universo nos ha ofrecido al prestarnos esta franja de tierra para convivir.

Decía Vaclav Havel que: ‘Trascender es la única y verdadera alternativa a la extinción '. Eso nos debe llevar a la reflexión sobre lo que queremos construir a partir de este momento y lo que queremos dejarle a las futuras generaciones. En todo caso, debe ser la educada conciencia de un mejor ser humano.

COMUNICADOR SOCIAL.