Las acciones de la Contraloría se dan tras más de un mes de huelga en el sector docente que arrancó formalmente el pasado 23 de abril
- 09/03/2010 01:00
Alcohol y tributos perdidos, una cuestión moral
Desaparecidos, así quedaron los impuestos al alcohol y a la cerveza. Mientras en el primer borrador de reformas se aumentaba el impuesto al alcohol en un 40% y a la cerveza una tarifa de $0,2325 por litro, las mismas se esfumaron de la última versión. Según Capital Financiero , solo el año pasado el consumo de seco aumentó un 36% y el ron un 18%.
El aumento global de bebidas alcohólicas fue de 7.1%. Con cerca de un millón de cajas vendidas por año (12 millones de litros), Varela Hermanos S.A. representa el 80% del mercado nacional de licores. Por su parte, Panamá es el segundo país latinoamericano con un consumo de cerveza de 64 litros per cápita por año ó 2 169 724 hectolitros, que representan 120 millones en ventas, siendo la Cervecería Nacional la dueña del 80% del mercado.
El alcohol es la mayor droga de consumo en el país, tal como lo reveló la Encuesta Nacional de Salud y Calidad de Vida (ENSCAVI). En cuanto al consumo de alcohol entre la juventud panameña, un estudio, realizado por la psicóloga Geraldine Emiliani, encontró que un 89% de los adolescentes encuestados (entre las edades de 14 y 16) consume alcohol en fiestas familiares y discotecas.
El consumo excesivo de alcohol, es una de las causas más frecuentes de transgresiones sociales, como violaciones y riñas, práctica de sexo sin medios de protección, abandono familiar y laboral. Se vincula mundialmente con el 50% de las muertes ocurridas en accidentes de tránsito y con el 30% de los homicidios y arrestos policiales. Reduce de 10 a 15 años la expectativa de vida y determina el 30% de las admisiones psiquiátricas y el 8% de los ingresos por psicosis. También se ha responsabilizado con casi la mitad de los condenados por faltas y delitos tan graves como asesinatos.
En este medio, se relaciona con la tercera parte de los hechos delictivos y violentos y entre el 20 y el 25% de las muertes por accidentes.
Estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que aumentar en un 10% los impuestos al alcohol, disminuye en 4% su consumo. No solo eso, disminuye también la capacidad de consumir hasta llegar a la embriaguez.
Estos impuestos pueden dedicarse a programas para la prevención del consumo de alcohol, educación para la salud y actividades de ocio alternativas.
También, se debe limitar el patrocinio de actividades deportivas por parte de las empresas fabricantes de bebidas alcohólicas o al menos, solo publicitar sus productos no alcohólicos como bebidas, agua, maltas, etc., además de eliminar progresivamente de los supermercados y tiendas de alimentación la presencia de bebidas alcohólicas, situándolas, en principio, en una zona diferenciada y estableciendo una caja específica para su pago y posteriormente, limitando su venta a comercios especializados.
Limitar los horarios de emisión de publicidad de bebidas alcohólicas, incluyendo la emisión de espectáculos o actividades deportivas en los que aparezca como patrocinadora, alguna marca de bebidas.
Estas medidas no son populares para mucha gente de nuestra sociedad superflua ni para algunos comerciantes, sin embargo, es lo correcto.
La tributación debe basarse en la equidad y la justicia. En todas las sociedades con elevado índice de Desarrollo Humano, el alcohol, los cigarrillos y los juegos de azar ocupan los primeros lugares en impuestos. Con esto, quizás algún día, pueda disfrutar con mis hijos un partido de béisbol de mi querida selección santeña sin gente alcoholizada ni marcas cerveceras en sus uniformes.
*Asociación Conciencia Ciudadana.concienciaciudadana09@gmail.com