Durante el primer trimestre de 2025, los puertos panameños movilizaron un total de 1.308.976 unidades de contenedores, de las cuales 556.369 corresponden...
- 18/06/2024 00:00
Es un problema de todos
La sociedad panameña ha sufrido una transformación en donde los valores han dejado de tener importancia, porque todo se resuelve con dinero o influencias.
El presidente electo acaba de hacer referencia al mal servicio que ofrece las empresas proveedoras de energía eléctrica y al parecer, como siempre, estas empresas no se dan por enteradas, porque el 8 de junio en San Félix y no sé si en todo el Oriente Chiricano se fue la luz (hubo apagón eléctrico o corte de luz ) más de 40 veces seguidas, de tal manera que al salir de casa, se prefirió bajar los breakers para evitar posibles daños mayores.
Sabemos que el mal servicio se acompaña de precios exorbitantes, no se mide el consumo, es más fácil calcularlo, para lo cual inventan cualquier justificación.
Además de la luz, también hay problemas de abastecimiento de agua potable; en verano porque no hay lluvias y en el invierno porque hay demasiada.
Como si fuera poco, además, vivimos bombardeado de una contaminación acústica que se produce por música estridente y con niveles peligrosos para la salud, sobre todo para los ancianos.
En San Félix, a cualquiera se le ocurre celebrar un cumpleaños o simplemente porque quiere hacer ruido, recibe el beneplácito de las autoridades que, por recibir unos pocos ingresos permiten estos excesos perjudiciales para todos los que desafortunadamente residen cerca de los centros de diversiones. Lo más lacónico, cuando a las dos o tres de la mañana se llama a la policía o se acude a las autoridades competentes, se recibe la respuesta de que ellos tienen permiso para realizar esta actividad, como si el permiso lo generara alguna autoridad celestial.
Pensamos que debe formalizarse otra alternativa, la sociedad debe tener, en este caso, la opción de pagar un permiso para que nadie haga escándalos sin tener una verdadera justificación.
La conclusión de todo esto, es que las autoridades en conjunto con la sociedad tienen que cambiar, empezar a valorar todo aquello que nos permitió evolucionar correctamente, iniciando con el respeto al derecho ajeno.
Cada vez que recibimos un servicio deficiente, cada vez que no nos dejan dormir por escándalos innecesarios, nos están faltando el respeto, nos están agrediendo y por ello, es necesario un cambio de actitud, porque adicional a ello, nos hemos ido acostumbrando a esta situación que ya lo damos como algo natural.
La oportunidad de iniciar un verdadero cambio en este sentido la tiene la administración que inicia el 1 de julio y le resta a la sociedad apoyarlos, entendiendo que el rumbo que llevamos de no cambiar nos llevaría a un punto de no retorno fatal.