• 15/12/2011 01:00

La importancia de la lectura

El primer día de clases para el niño es una experiencia determinante que añade otra dimensión en su vida, la cual nunca más será como an...

El primer día de clases para el niño es una experiencia determinante que añade otra dimensión en su vida, la cual nunca más será como antes. En el colegio tendrá que enfrentarse solo por primera vez en su vida a un mundo diferente al que ha conocido y que lo marcará. El sistema escolar al que se verá expuesto tiene una burocracia, sus propias leyes y normas de vida. Las escuelas son creadas y mantenidas para el bienestar y crecimiento intelectual e integral de los niños, pero no siempre resulta así.

El pequeño tiende a relacionar el mundo, su concepto de la sociedad, basándose en sus experiencias colegiales que influyen mucho en el concepto que tiene de su persona en relación al mundo, como parte de la sociedad. Si tiene buena acogida, tendrá éxito; si no, se sentirá defraudado, derrotado. En los jardines de infancia aprende a socializar, jugar con otros niños, familiarizarse con materiales didácticos que le preparan para el aprendizaje formal, la importancia del papel de su maestro, entra en contacto con el sistema educativo. Si le va mal, sospecha del maestro, cierra su mente y conducta al sistema convirtiéndose en un rebelde.

El aprendizaje de la lectura sella su vida futura académica, determinando su deseo de aprender, inculcando confianza en su inteligencia y aptitudes académicas. La manera como el maestro le presente la literatura y la lectura es determinante para que esta experiencia sea valiosa, agradable, fructífera, deseada, entonces el esfuerzo será compensado con creces por las inmensas ventajas que brinda la lectura.

El apoyo familiar es importantísimo, si los padres estimulan la lectura, el niño se sentirá orgulloso de leer, pero si los textos que le obligan a leer son vacíos, marchitará y deteriorará su esfuerzo, conduciéndole a aprender de memoria textos aburridos y estériles, lo que constituirá un insulto a la inteligencia del niño, en vez de conducirle a la lectura de un contenido con significado, guiándolo al dominio de la literatura incentivándolo a la búsqueda de la sabiduría.

El ejercicio repetido es necesario para adquirir habilidades, destrezas, el niño puede aprender a descifrar, leer letreros en la carretera. Los niños maduran de acuerdo con las diferencias individuales, unos aprenden antes que otros, la gran mayoría debe saber algo de lectura hacia el primer grado.

Cuando lo que se lee es estúpido, aburrido, ofensivo para su inteligencia, degradan la incipiente capacidad de su asimilación de conocimientos, la lectura pierde sentido e interés, sintiéndose incapaces de hallar sentido. Es vital que disfrute la lectura y la literatura. Que aprenda a amar los libros. Encontramos muchos niños y jóvenes que leen, pero son iletrados, el analfabetismo funcional resulta cuando se decodifican las palabras, pero no se entiende el texto.

Este problema es muy serio. Se aprende de memoria una poesía, pero no se entiende de qué trata.

Aproximadamente el 50% del rendimiento escolar en el duodécimo grado ha sido alcanzado al finalizar el tercer grado. La importancia de los primeros años, en la adquisición de las pautas de lectura es básica. Si no se consiguen rendimientos y aprendizaje apropiados se arrastrara al fracaso total.

El estudio de problemas escolares comenzó con Lightner Witmer, padre de la psicología escolar, en la Universidad de Pensilvania, enfocándose en el desarrollo mental, físico de niños con problemas escolares, conductuales, dificultades en el manejo de la disciplina y aprendizaje, desarrolló una clínica sicológica para curar, mejorar deficiencias, recomendar el tratamiento apropiado psicopedagógico.

El propósito de la escuela es desarrollar al individuo, facilitar el progreso humano. Es la institución social que debe atender al estudiante, brindarle la ayuda que no recibe en casa.

PSICÓLOGA Y DOCENTE UNIVERSITARIA.

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