Por qué la Orden Marta Matamoros

Marta Matamoros nace en San Felipe, ciudad de Panamá, el 17 de febrero de 1909, modista de profesión, fue una mujer que luchó por mejorar las condiciones de vida de las mujeres panameñas.

La profesora Tayra Barsallo, en el libro “El camino es la organización”, nos indica que “esta frase no es un simple slogan, es la conclusión lógica de una vida dedicada por entero a las luchas en pos de la justicia social, la igualdad, la paz y la liberación nacional”.

Marta tuvo una participación beligerante en las luchas que se dieron en el país e impulsaba la participación de las compañeras trabajadoras en las mismas. No solo estrictamente sindical, sino en el plano de la defensa de la soberanía, la solidaridad con los pueblos, y, desde luego, la defensa de los derechos humanos y de las mujeres.

Participa en el Movimiento Inquilinario de 1925, y nos dice que fue un poderoso movimiento que promovió una huelga de reclamos, de reivindicaciones económicas y sociales, especialmente contra la explotación de los caseros. Durante la Segunda Guerra Mundial, se constituyó en Panamá un Comité de Solidaridad con los pueblos que luchaban contra el fascismo. Para 1946, nos dice Marta, se habían fundado algunas organizaciones cívicas y pequeños sindicatos de acuerdo a la especialidad del trabajo, ya participaban en estos obreras y empleados del comercio, desafiando las represalias antisindicales de la patronal. Marta nos señala que, entre 1945-46, entró en discusión el proyecto de Ley del Código de Trabajo, presentado por los diputados constituyentes. “Las obreras del Sindicato de la Confección de la Ropa y el Calzado presentamos ante la Asamblea un memorial con cientos de firmas de mujeres y un anteproyecto pidiendo la Ley de Protección de la Maternidad de la Mujer Trabajadora con los siguientes puntos: que no fuera despedida la obrera en estado de gravidez, proporcionarle los trabajos menos pesados, descanso remunerado con salario completo (seis semanas antes del parto y ocho después del parto), que la empresa que tuviera más de 50 mujeres obreras acondicionara una sala inmediata al centro de trabajo con facilidades para que la madre en el período de lactancia alimentara a su hijo durante la jornada de trabajo. Este proyecto fue aprobado y quedó vigente en el Código de Trabajo de 1947.

La participación de Marta en la Marcha del Hambre y la Desesperación, lucha sindical que benefició a todo el pueblo. En el pliego se planteó lo siguiente: 1. Establecimiento del Salario Mínimo, escalonado de acuerdo con la profesión, u oficio a nivel nacional; 2. Rebaja de los alquileres de los cuartos y piezas en las casas de inquilinatos al nivel que se pagaban diez años atrás; 3. Aprobación de la Reforma Agraria. Estas son entre muchas otras luchas en las cuales participó como dirigente Marta Matamoros.

Ha sido esta participación lo que llevó a que diversas organizaciones de mujeres demandaran del Gobierno nacional la creación de la Orden Marta Matamoros en el 2006, el objetivo es condecorar a mujeres trabajadoras con esta Orden y resaltar la lucha realizada por una de las primeras mujeres dirigentes en el movimiento sindical, se establece la Orden por medio del Decreto Ejecutivo N.° 81 del 18 de mayo de 2006, y el perfil para participar en el concurso para obtener la orden Marta Matamoros.

Marta Matamoros, una de las primeras mujeres dirigentes que organizó el movimiento femenino sindical en Panamá, creyendo en la organización como única vía para la lucha de reivindicación y liberación de los sectores oprimidos y marginados. Consagró su vida a la defensa de los intereses de la clase obrera, particularmente de las mujeres trabajadoras; así como por la justicia, e igualdad social y de género, la soberanía nacional, la paz mundial y la solidaridad entre los pueblos, nos señala el primer considerando del Decreto 81.

Hace varios años que no se lleva a cabo el concurso, razón por la cual, mujeres de distintas organizaciones, solicitamos a la ministra de Desarrollo Social, María Inés Castillo, en calidad de presidenta del Consejo Nacional de la Mujer (Conamu), que se efectúe el concurso. Es necesario que no retrocedamos en logros obtenidos en beneficio de las mujeres. Aprovechamos la oportunidad para demandar la necesidad de destinar los recursos que se requieran para instituciones establecidas para apoyar a la mujer, tales como Inamu e IMUP.

Es necesario mantener presente el ejemplo de vida y luchas de Marta Matamoros, y recordar como lo decía: “El camino es la organización, para defender y lograr nuevas conquistas hay que organizarse”.