Carnaval

¡Que suene la murga! Arranca la fiesta favorita de los panameños. Las reinas, tunas, comparsas y culecos comienzan a brillar. Cómo no ilusionarse ante esta celebración que representa una gran oportunidad para ensalzar nuestro folclore y a la vez generar empleos para miles de personas asociadas al sector creativo y turístico. Ya lo hemos contado: el Carnaval de este año podría generar una derrama económica superior a los $300 millones, un ingreso crucial en estos tiempos. Otra de las caras más notables de esta celebración es la unión: hay que subrayar que esta festividad derriba esas bardas sociales que jerarquizan los espacios sociales, dando paso a un solo espíritu de celebración. La fusión de colores, ritmos y tradiciones se convierte en un catalizador de experiencias para nacionales y extranjeros. Este año, el Carnaval llega en medio de una dura y atípica situación política. Puede que las feroces campañas quizás irrumpan -sin disimulo- y ojalá que no manchen la esencia carnavalera. Confiemos que - hoy y siempre- el elector exija que se quiten las caretas a quienes pretender liderar el país, deben mostrarse tal cual son. Apelamos también a la responsabilidad y a la conciencia. Exigimos, además, seguridad de las autoridades para garantizar la tranquilidad de los asistentes. Disfrutar sanamente es tarea de todos.