Otra vez, la Medicina en entredicho...

Saliéndonos de lo estrictamente relacionado con las argucias legales del magistrado separado Alejandro Moncada y sus abogados, para evitar su comparecencia ante sus juezas y lograr agotar ánimos, para que se eche para atrás el acuerdo que firmó, aceptando un par de delitos, nos vamos a un hecho sumamente preocupante, quizá más. Una miembro del sector de la Salud que se presta para esta tramoya baja. Ya sabemos que hace muchos años se venden los certificados de incapacidad. Antes, en cualquier clínica de barrio tenían un costo de cinco dólares, suponemos que ya subieron de precio. Pero resulta indignante que una profesional de la Medicina, de un centro médico de prestigio o del consultorio del barrio, se preste para abrir portillos a quienes quieren verle la cara de tonta a la Justicia y, de paso, a todo el país. Esto no se puede quedar en un grito en medio del escándalo del Caso Moncada. Es hora de que autoridades y profesionales de la Salud se pongan serios y recuerden las leyes, ya que muchos galenos parecen haber olvidado el juramento hipocrático.