Grandes hombres

En una semana el país ha perdido a dos grandes patriotas enlazados por el mismo apellido. Se trata de Don Roderick y el doctor José Renán Esquivel. Quiso el destino que ambos jugaran un papel crucial en la historia reciente de la nación. Don Roderick, un político excepcional, ejemplo de rectitud y quien _como vicepresidente electo_ tuvo la valentía de mantener sus convicciones firmes frente a la avasallante amenaza del régimen militar, cuando a fines de los años ochenta supo abandonar el poder para no traicionar sus principios. El doctor José Renán, en tanto, luchó durante la mayor parte de su vida por la atención pediátrica y acuñó en la historia de la medicina pública istmeña, la frase ‘salud igual para todos’. De ahí que sería un homenaje justo honrar su memoria con inmortalizar su nombre en el hospital pedriático de la Caja de Seguro Social.