Sicariato sin freno

A pesar de que las estadísticas de la Policía Nacional señalan que este año los homicidios han disminuido a nivel nacional como parte de las acciones emprendidas en materia de seguridad, las muertes con etiqueta de sicariato al estilo de los narcos han reactivado su impacto con sangre y luto en la ciudadanía. Tan solo la semana pasada hubo 16 ejecuciones repartidas entre la capital, el sector oeste y Colón. Y lo más preocupante de esos asesinatos a sangre fría, ocho fueron cometidos entre el sábado y el domingo pasados. Es obvio que no se trata de la percepción ciudadana o que algunos medios informativos estén exagerando, como alegan las autoridades. Se trata de vidas humanas arrancadas incluso dentro de un bus, como ocurrió hace unos días, y la Policía tiene el deber de proteger no a una, sino a todas las personas y para esto no se puede dar por ganada una lucha que es permanente.