Institucionalidad

Un país requiere de una institucionalidad sólida para que funcione la democracia. Decidimos vivir en democracia, pero por desgracia, conscientes o inconscientes, emprendimos el deterioro paulatino de nuestras instituciones públicas y hoy nada se mueve si no es por la influencia. Así pronto no existirá democracia, será demasiado tarde para rescatar nuestra nación y soberanía. Parece dramático, pero así es. Un simple caso de corregiduría se convierte en una pesadilla. ¡Nos ufanamos por tener influencia! La Estrella, desde hoy y en tres entregas, analiza la problemática, para levantar consciencia del grave problema que padecemos. Podemos ser un país desarrollado, de primer mundo, mas con el deterioro de nuestra institucionalidad, todo será solo un sueño. En víspera de las elecciones generales, esperamos que los diversos candidatos nos propongan la mejor forma de rescatar nuestras instituciones. De nada sirve escoger nuevas autoridades si sigue el deterioro de nuestra institucionalidad. ¡Reaccionemos!