Infraestructuras educativas, otra materia pendiente

Se acerca el período escolar. Y como si fuera un disco rayado, el mismo estribillo se escucha: ‘Varios colegios no estarán listos para iniciar clases'. En algún momento de la campaña política del año 2014, quien era candidato, y hoy es presidente de la República, centró su propuesta en el establecimiento de las llamadas ‘Mesas de Compromiso' para mejorar, entre otras cosas, el sistema educativo del país. Es imposible separar entonces una cosa de la otra. Si se persigue la mejora de nuestro sistema educativo, en cuanto a planes y programas de estudio, esta tiene que ir casada con nuevas y modernas infraestructuras que acompañen de manera uniforme un relanzamiento de la educación panameña. Este año 2016 no va a ser distinto a la última década al comenzar el período lectivo. En el Consejo de Gabinete del pasado 21 de enero, se aprobó una partida de $1.15 millones para reparar dos colegios, uno en Colón y otro en Chiriquí. Sin embargo, en La Chorrera, la escuela República de Costa Rica no está lista para iniciar clases este año; tampoco lo está el Instituto América en la ciudad capital. La escuela Ernesto T. Lefevre acusa un severo deterioro que obligará a utilizar sedes alternas, inadecuadas, para que los alumnos reciban clases. Apelar a la descentralización como alternativa para mantener y reparar las escuelas públicas apoya la tesis de que el presupuesto del MEDUCA se lo chupan los salarios que se pagan en todo el sistema educativo, quedando migajas para atender las infraestructuras en el país. Y así, nuestra educación seguirá siendo pobre, producto de esta situación.