Nos urge una Meta País

La sociedad panameña ha perdido años por estar sometida a costumbres aplicadas sistemáticamente por los políticos. Este sometimiento ha creado problemas estructurales que nos han hecho dependientes de los diferentes Gobiernos para solucionar problemas que la propia comunidad puede solucionar. Aunado a esto, la falta de liderazgos sólidos nos ha mantenido inertes a cualquier cambio, hasta ahora que vemos cómo la sociedad empieza a despertar y cuestionar lo que desde hace años viene mal. Durante décadas nos dijeron que los panameños no somos capaces de nada. Con la entrega del ferrocarril y su evidente deterioro luego de que los estadounidenses nos lo revirtieran, se dijo que con el Canal iba a pasar lo mismo. Por fortuna no ha sido así y esta es una prueba fehaciente de que los panameños somos capaces de hacer cosas grandes, siempre y cuando nos lo propongamos. Estamos por finalizar las dos primeras décadas del Siglo XXI y no tenemos nada en el horizonte que nos indique hacia dónde vamos. Hablamos generalidades, pero no tenemos una Meta País en común. Ni siquiera sabemos hacia dónde crece la ciudad. Es por esto la urgencia de sentarnos en un Gran Diálogo Nacional y hacer una hoja de ruta. Hay que echar a un lado diferencias políticas y pensar en grande. Y no se trata de quién está en el Gobierno, de lo que se trata es de cuál es el camino a seguir y esto debemos diseñarlo todos los panameños para entrar en la siguiente década sabiendo hacia dónde vamos y qué queremos lograr como sociedad.