Este no es el camino

En este mundo globalizado, los diversos países buscan su espacio para sacar la mayor ventaja. Panamá tuvo un gran plan con la recuperación de la Zona del Canal y luego de que la vía acuática fuese administrada por los panameños, en conjunto decidimos su ampliación. El problema ahora es que la junta directiva de la Autoridad del Canal de Panamá ha ido conformándose por un solo sector de la sociedad, cuyo objetivo siempre ha sido el control de los negocios en la República. Esta situación nos ha llevado a que la ACP se embarque en proyectos donde los intereses que priman son los de ese sector y no el de la sociedad en su conjunto. Y es que el país, al estar sin una entidad que planifique y nos proyecte en el tiempo, el futuro mismo de la nación está bajo el radar de quienes controlan los negocios. En pocas palabras, es un sector de la sociedad el que planifica el país en base a sus intereses y por eso se ha entronizado en los partidos políticos y ha logrado tener el Gobierno como una sucursal de su conglomerado económico. ¿Es eso lo que necesitamos para Panamá? Definitivamente, no. Pero el problema es real, ya que han logrado penetrar las principales fuentes de riqueza. Urge una recomposición de la economía y del sistema político, porque la proyección nos indica que de continuar como vamos, habrá más desigualdad y donde la clase media será duramente castigada, porque o eres rico o eres pobre o más pobre y solo deberás alegrarte por las dádivas en ayudas sociales. El Panamá que anhelamos debe ser el de todos los panameños, porque no queremos repetir la experiencia de Venezuela antes del chavismo y ahora con el chavismo.