Empatía

En un mundo de guerras, crisis migratorias, alzas de precios, intolerancia y adicciones tecnológicas, se necesita el desarrollo de nuevas y mejores habilidades, como la empatía, que -según la OMS- es esencial para la vida. Como una semilla de paz, definía Mahatma Gandhi este valor, quien estaba convencido de que “las tres cuartas partes de las miserias y los malos entendidos en el mundo terminarían, si las personas se pusieran en los zapatos de sus adversarios y entendieran su punto de vista”. Esta virtud es difícil de medir, pero, según un estudio de la Universidad de Michigan de 2021, las naciones más empáticas son Ecuador, Arabia Saudí, el Perú, Dinamarca. Emiratos Árabes Unidos, Corea del Sur, Estados Unidos, Taiwán, Costa Rica y Kuwait. El país menos empático es Lituania, seguido de Venezuela, Estonia, Polonia y Bulgaria. Aunque Panamá no figura en la lista, un estudio de la Unesco determinó que la mayoría de los estudiantes del país tiene una actitud positiva frente a las personas de origen y cultura diferentes, y también son empáticos, dato clave, ya que, según expertos, durante la niñez y la adolescencia se debe educar en la empatía para prevenir actos violentos, como el acoso escolar. Es indiscutible que, si hay más empatía en una sociedad, se logra la prevención de la violencia. Si se fomenta desde todos los frentes este valor, se logrará un país más humanizado, respetuoso y solidario.