De tarifas y otras aristas

S iendo justos, debemos reconocer que el aumento temporal no ha afectado a la mayoría de la población, porque el mismo no tiene vigencia en los distritos de Panamá y San Miguelito en donde circula la mayoría de los usuarios del transporte público.

Aunque a nadie le gusta pagar más, debemos tomar en cuenta que el aumento temporal afecta solo a distritos en donde el servicio de transporte público es prestado con bastante eficiencia y que pese a ello, la tarifa no ha sido revisada desde hace décadas, a pesar de los aumentos en el combustible y otros derivados del petróleo que utilizan los transportistas; esto último ha sido posible gracias a los subsidios que el Estado otorga a las organizaciones transportistas. Quizás lo siguiente no reconforte a quienes tendrán que pagar el ajuste temporal, pero también se hace necesario destacar que Panamá cuenta con una de las tarifas más bajas del continente.

En Colombia por ejemplo, el pasaje de ruta normal cuesta 1400 pesos (unos 76 centavos de dólar) y 1450 pesos los domingos, en las noches y los días feriados, mientras que los buses articulados cuestan 1700 pesos (93 centavos de dólar).

Si quiere ir de Bogotá a Tunja, a dos horas de distancia, tendrá que desembolsar 23000 pesos (12 dólares con 63 centavos aproximadamente). Si quiere ir de Bogotá a Pereira (más o menos la distancia de la ciudad de Panamá hacia David) tendrá que pagar 50000 pesos (27 dólares con 47 centavos aproximadamente).

El salario mínimo en Colombia es de 535 mil pesos (unos 293 dólares con 95 centavos aproximadamente). Muchos dirán que vivimos en Panamá no en Colombia. Eso es cierto, sin embargo, no cabe duda que nuestro vecino sudamericano tiene un costo de vida elevado comparado con nuestro país.

Para ir de Bogotá a Chía tendrá que pagar 3000 pesos (1 dólar con 64 centavos) y debe abordar el autobús desde el Portal Norte, que está a casi 20 minutos del municipio de Chía en Cundinamarca. Aquí en Panamá, a aquellos que viven en el área Oeste de la provincia cabecera, les cuesta sólo 60 centavos el pasaje si vive en Vacamonte ir a la ciudad de Panamá.

Sin duda, somos un país privilegiado frente a otras naciones con mayores potenciales que el nuestro. Solo tenemos que ver que en Colombia, la gasolina de 95 octanos (le llaman extra) cuesta desde hace mucho tiempo cinco dólares el galón; cruda realidad, si tomamos en cuenta que este país tiene una inmensa riqueza petrolera y cuenta además con refinerías.

El problema de los derivados del petróleo es externo, por lo que culpar al gobierno es un acto político de demagogia. Incrementar la tarifa fue la mejor decisión, de lo contrario, tendríamos quizás que sacrificar varios programas sociales como 100 a los 70, la mochila con útiles, cuadernos y textos escolares o el Bono de B/5000.00 para la compra de la primera vivienda de interés social.

*PERIODISTA Y EX DIPLOMÁTICO.