La formación integral para la excelencia académica

En el ámbito de la educación superior, contar con una formación integral debe ser el anhelo que impere en estos tiempos en que la sociedad demanda una gran diversidad de competencias, tanto para dar respuesta a los retos que estamos llamados a responder, como por la educación de excelencia que las instituciones tiene que brindar.

Panamá demanda mejores profesionales con formación integral valórica (valores morales, éticos, estéticos, intelectuales, religiosos y sociales); hace falta formar profesionales con principios humanistas y sentido social, en cuyo desarrollo se constituyan los conceptos de eficiencia y eficacia, y que la solidaridad ocupe un lugar principal y la comprensión de la misión social en su formación predomine, así como la ética. La sociedad merece que la inversión efectuada tenga un retorno de bienestar en las capas sociales depauperadas.

Con la llegada de la globalización, la educación de nivel superior debe proporcionar profesionales altamente calificados y ciudadanos responsables producto de un espacio abierto que propicie el aprendizaje permanente, la comprensión y difusión de las culturas en un contexto de pluralismo y diversidad cultural. Un profesional más integral para una sociedad en constante cambio, donde se le reclama al ciudadano mayor participación en la construcción de nuestro país.

La Constitución Política de la República de Panamá en su Capítulo V, artículo 88 indica que ‘La educación debe atender el desarrollo armónico e integral del educando dentro de la convivencia social, en los aspectos físico, intelectual y moral, estético y cívico y debe procurar su capacitación para el trabajo útil en interés propio y en beneficio colectivo'.

Para ser consecuente con este postulado constitucional es necesario el desarrollo pleno de la personalidad del estudiante, con una formación que contemple -además de cada disciplina científica o técnica- la articulación de una serie de actividades, eventos, servicios y programas de atención. Que el estudiante se desarrolle de acuerdo a sus gustos en una gran variedad de talleres alternativos y actividades extracurriculares que le van a propiciar una vida más plena.

En otros países, como Cuba y Brasil, se pondera este aspecto de la formación integral y es reconocido al finalizar los estudios con la entrega de un pergamino al estudiante más integral, porque se entiende que los profesionales van a participar -no sólo técnica y científicamente- en otras muchas actividades, como son las sociales, culturales, deportivas, éticas y estéticas.

El Modelo Universitario de la Universidad Especializada de las Américas crea los espacios apropiados para la formación de un estudiante con altas competencias en las áreas de su especialidad, basada en los principios universitarios de investigación e innovación, docencia y extensión universitaria, y que paralelo a ello se cultiven los valores éticos, culturales, artísticos, deportivos, lingüísticos de civismo e identidad nacional en cada una de las extensiones y programas académicos.

DECANA DE VIDA ESTUDIANTIL