El presidente Mulino cuestiona lo poco enérgicas que son las medidas cautelares de los jueces de garantías
- 11/07/2011 02:00
PANAMÁ. Las tragedias en la construcción no solamente cobran vidas de trabajadores sino que además mueren transeúntes o conductores que pasan cerca de las obras.
En abril de 2010 se registró uno de estos accidentes. Un taxista y su esposa fueron aplastados por una plancha de metal que se desprendió de las alturas de la torre Rivage en la Avenida Balboa a las ocho de la mañana.
Según testigos, la grúa ubicada en lo más alto del edificio, golpeó accidentalmente una plancha de metal, la desprendió y la hizo caer sobre el taxi.
El impacto fue tan grande que el conductor Edwin Vallejos murió instantáneamente, su esposa resultó gravemente herida.
Afortunadamente, Vallejos era el único que transitaba a esa hora por la avenida. varias personas señalaron que escuchó un gran estruendo.
El Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (MITRADEL) paralizó la obra hasta que se solucionase las irregularidades.
Ese mismo día, el 10 de abril, una mampara de seguridad mató a Iván Rosero, un obrero que trabajaba en la construcción del edificio Bay Star, también en Avenida Balboa.
Luego de las inspecciones se encontraron una serie de irregularidades en la torre Rivage.
Genaro López, secretario del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (UNTRACS), mencionaba que se deben tomar medidas en este caso, pues existen diversos proyectos de construcción donde las cargas circulan por encima de los vehículos.