El nuevo presidente de la Asociación de Armadores Panameños reflexiona sobre las oportunidades y retos del sector marítimo

- 09/09/2025 17:59
La posibilidad de que Panamá sometiera a consulta ciudadana su permanencia en el Parlamento Centroamericano (Parlacen) murió.
Este martes, la Comisión de Gobierno de la Asamblea Nacional rechazó el anteproyecto de ley presentado por los diputados Neftalí Omar Zamora Ibarra y Yarelis Rodríguez Batista, el cual buscaba convocar un plebiscito nacional sobre este tema que, desde hace décadas, genera polémica en el país.
Los votos en contra correspondieron a Luis Eduardo Camacho (Realizando Metas) y Shirley Castañedas (Partido Revolucionario Democrático, PRD). Se abstuvieron Raphael Buchanan (PRD), Sara Magallón, suplente del diputado Jairo Salazar (PRD), y Ana María Poveda Herrera, suplente de Didiano Pinilla (Cambio Democrático).
El anteproyecto planteaba una consulta popular no vinculante con una pregunta directa: “¿Está de acuerdo con que la República de Panamá permanezca en el Parlamento Centroamericano (Parlacen)?
Zamora Ibarra defendió que la medida respondía al derecho del pueblo panameño de expresarse sobre un organismo “que consume recursos públicos sin aportar beneficios tangibles” y que, en la práctica, otorga un “blindaje judicial” a expresidentes, exvicepresidentes y exdiputados que pasan a formar parte del ente regional.
El diputado recordó que Panamá destina $2.3 millones anuales como cuota de participación en el Parlacen, cifra que, según él, se convierte en un gasto innecesario frente a otras prioridades nacionales. “No es integración, es impunidad”, sentenció el independiente Roberto Zúñiga, quien respaldó la propuesta junto a Luis “Lucho” Duke y la diputada Janine Prado.
La discusión sobre la salida del Parlacen no es nueva. En 2009, la Asamblea Nacional aprobó la Ley 78 que derogaba las normas relacionadas con el organismo regional, en un intento de retiro unilateral.
Sin embargo, en 2012 la Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional la medida, amparándose en la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados, que impide que un país utilice su derecho interno para incumplir compromisos internacionales.
En ese fallo, la Corte sí estableció que existen vías viables para un eventual retiro:
1. Negociar el consentimiento de los Estados Parte.
2. Proponer reformas al tratado que contemplen una cláusula de salida.
3. Invocar un cambio fundamental en las circunstancias, según el Artículo 62 de la Convención de Viena.
El anteproyecto de Zamora buscaba apoyarse en este último punto, utilizando el plebiscito como una demostración de la voluntad soberana del pueblo panameño, con la intención de fortalecer los argumentos del Ejecutivo en un escenario internacional.
El rechazo del anteproyecto encendió críticas de la bancada independiente, que acusó a la Comisión de Gobierno de evitar debates incómodos relacionados con la transparencia y la lucha contra la corrupción.
“Salirnos del Parlacen es una acción necesaria, ya que no está generando nada para el país. Blindan judicialmente a expresidentes y generan un gasto innecesario”, declaró Duke.
En tanto, Zúñiga subrayó que el rechazo refleja la resistencia de algunos sectores políticos a tocar privilegios adquiridos. “Hoy la Comisión rechazó la propuesta de retirarnos de una institución que protege a corruptos”, afirmó.