Tope y subsidio a los partidos, escollos de la reforma electoral

La discusión por el tope a las campañas electorales y la financiación de los partidos políticos dominará la agenda de reformas electorales de cara al 2019: las formaciones se oponen a que se le recorten fondos y controlen los gastos eleccionarios, mientras que los grupos socialaes organizados exigen cambios profundos a la ley.

Los frentes han chocado en la mesa de la Comisión de Reformas Electorales (CNRE), que discute en primera instancia el borrador de las modificaciones al Código Electoral. En teoría, la Asamblea Nacional respetará lo que se acuerde allí, tomando en cuenta que todos los partidos están representados.

Las agrupaciones políticas propusieron el jueves mantener el equivalente al 1% de los ingresos corrientes del Estado para su financiamiento. No obstante, bajo esa fórmula la cifra a destinarse a los partidos terminará rondando los $99 millones en el quinquenio 2019-2024.

‘Eso debe quedar en la mitad', pregona Maribel Jaén, de la Comisión de Justicia y Paz de la Iglesia católica. ‘¿Cómo se les va a dar ese dinero si el Estado tiene una mora en salud y educación? Los partidos piensan que el Estado es patrimonio de ellos', sigue.

‘Hay que garantizar la existencia de los partidos políticos', reclamó el representante de Cambio Democrático Hugo Polo.

La sociedad civil organizada ha pedido que el monto de financiación de los partidos sea reducido a 0.5% de los ingresos públicos y que esta medida sea sometida al comportamiento del padrón electoral, en lugar de a cómo se mueva la economía.

El abogado Carlos Gasnell, presidente del capítulo local de Transparencia Internacional, ha resaltado que el subsidio estatal a los partidos ha crecido a un ritmo diez veces mayor que el resto de los factores de las elecciones: de 2009 a 2014 aumentó en 107% el financiamiento político, cuando el padrón creció 11%, el número de mesas, 13%, y la cantidad de cargos a elegir, apenas 3%.

Pero la discusión se encona todavía en la manera en la que se sufragarán los gastos de los comicios. El presidente Juan Carlos Varela ha pedido expresamente al Legislativo poner tope al gasto de las campañas políticas y controlar las donaciones privadas.

Su planteamiento ha llegado a la CNRE de boca del partido Panameñista, cuyo representante Herbert Young ha propuesto que la ‘mayoría' del financiamiento venga del Estado.

Desde el PRD, Darinel Espino sostiene la necesidad de que el modelo que se adopte sea mixto, que se fortalezca el rol de la Contraloría en la fiscalización y que deshaga los subsidios políticos que, dice, ‘desequilibran' el sistema electoral.

El Foro Ciudadano ha pedido que el dinero que se le entregue a los partidos ($49.5 millones, piden) se invierta 70% en la etapa preelectoral y 30% en la post electoral, en lugar de 40%-60%, como ocurre en la actualidad.

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‘(El subsidio electoral) debe quedar a la mitad. Los partidos piensan como si el Estado es patrimonio de ellos',

MARIBEL JAÉN

JUSTICIA Y PAZ

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‘Debemos de pensar y ver esto con luces largas. Los partidos políticos tenemos derecho a evolucionar',

HUGO POLO

REPRESENTANTE DE CD

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EL SUBSIDIO A LOS PARTIDOS

El financiamiento está regulado por el Capítulo V del Código Electoral

$99 millones recibirán los partidos en el quinquenio que empieza en 2019, según los pronósticos del Tribunal Electoral.

$49.5 millones es lo que deben recibir las organizaciones políticas, sostiene el Foro Ciudadano Pro Reformas Electorales.