La prensa insurgente en la independencia

En nuestro siglo XIX y principios de la independencia del 3 de noviembre de 1903, los periodistas pueden catalogarse de colonialista e insurgentes. Hecho común sucedió también en otras regiones.

Ante la prensa colonialista y peninsular se alzaba la revolucionaria. Simón Bolívar fundó El Correo del Orinoco y el José Martí, a los dieciséis años, imprimió el Sibauey .

En el proceso del ascenso del liberalismo -desde antes de la creación del Estado Federal (1855) hasta finales del siglo XIX- aparece el diario liberal La Miscelánea del Istmo. Expresión , según Mariano Arosemena, fue autónoma y se caracterizó por constituir un bastión de los principios republicanos.

Lúcido testigo y expresión del liberalismo se erigieron el Círculo Istmeño , el Comercio Libre y el Panameño .

Hacia la primera década del cuarenta del siglo XIX, fueron los periodistas anticlericales y masones. Pero tiempo y disciplina existen para los entusiasmos literarios. En este sentido, ejemplos singulares lo constituirán el Céfiro (1866); y el Crepúsculo (1870).

Nuestro ambiente de ciudades puertos hace naufragar los intentos intelectuales, y las proclividades artísticas. Pero con suficiente aliento revolucionario se suman a la vocación independentista los diarios El Deber , la Nube , el Duende y el Lápiz .

PRENSA BELIGERANTE

Los partidos se parten el alma en el campo de batalla. La pluma, tinta y prensa se unifican en la tarea de creación de las nuevas entidades independientes. Los efímeros periódicos surgen en la clandestinidad. Periodistas de la talla de José de Obaldía hasta el general Tomás Herrera forman una conjunción de actos beligerantes y acciones moralizadoras.

Los insurrectos periodistas reciben su reprimenda. Al diario el Deber se le imponen multas de cien pesos. En respuesta a esta censura ese rotativo protesta en su número 50 del 31 de julio de 1894. Luego la represión del ejercito conservador cae sobre León A. Soto, defensor del proletariado santanero integrado por negros, campesinos, aguateros y carpinteros, quien a juicio de aquellos cometió un acto periodístico libertario, fue una de sus víctimas y como resultado de la paliza que le propinó la gendarmería conservadora, falleció el 2 de febrero de 1902.

Hoy rendimos homenaje a los periodistas de inicio de la República. entre ellos: José Sacroviz Mendoza, Emilio Briceño y Rodolfo Aguilera. El primero fallece el 21 de enero de 1894. Briceño fue víctima de un atentado cuatro meses antes de la independencia. Allanaron el diario el Lápiz y le propinaron de bastonazos a Briceño como venganza por participar en la batalla de la Negra Vieja y propiciar la independencia.

Sufrió el escarnio de la cárcel. Rodolfo Aguilera fungió de secretario del general Victoriano Lorenzo y estuvo presente en los finales de la guerra de los Mil Días, lo exiliaron y retornó para luchar por la independencia. Y en 1916 fallece ya abatido por las dolencias de las guerras.

Mendoza murió solo y en la más humillante pobreza el 30 de noviembre de 1936. Estos periodistas hoy se encuentran olvidados, pero por su aporte a la consolidación de la nacionalidad, es oportuno recordarlos en nuestras efemérides patrias.