La cantante argentina Nicki Nicole resalta la importancia de mantenerse “con los pies en la tierra” en una entrevista con EFE por su visita a México, donde...
- 15/08/2014 02:00
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El inicio no fue romántico, fue étnico, pero igual arrancó aplausos y gritos. A las 9:35 de la noche, Franco de Vita pisó el escenario ubicado en el centro de la arena Roberto Durán. Él abrió la noche. ¿Y los teloneros? Ellos pasaron a ser compañeros del cantante venezolano.
‘Tan solo tú’, tema que originalmente canta con Alejandra Guzmán, fue uno de los primeros de la noche. Éste fue compartido con una intérprete venezolana que fue escogida a través de un casting . Esta chica fue la primera en elevar su voz a la par de la de De Vita. Con evidente emoción la cantante hizo su despliegue.
San Luis (dúo compuesto por Santiago y Luis) también tuvo su turno con el artista venezolano con ‘Si la ves’ y otros más. Las voces de estos jóvenes no tienen nada que envidiarle al estelar de la noche, de hecho se dejaron oír como el complemento ideal para el show .
‘El norte del sur’ y ‘Somos tres’ siguieron en el repertorio. La algarabía bien puede citarse entre tal itinerario, pues las más de 10 mil personas que abarrotaron las instalaciones deportivas no dejaban de gritar, de aplaudir y hasta de bailar.
El mexicano Carlos Rivera le acompañó en ‘Y tú te vas’, mientras los brazos del público se levantaban para moverse de un lado a otro al ritmo de la canción.
En todo momento, Franco de Vita se mostró humilde al lado de sus similares, los hizo sentir como las estrellas que son y no dejó de pedir aplausos para ellos.
‘Solo importas tú’ y ‘Entre cálido y frío’ amenizaron el ambiente. Seguido de estas piezas, fue el turno del colombiano Gusi con ‘Ya lo había vivido’, claro, a la par de De Vita.
Aunque todos se lucieron, Debi Nova brilló con un encanto particular. Con sus pies descalzos y potente voz, la cantante del vecino país de Costa Rica cantó al lado de su colega en ‘Si quieres decir adiós’.
Por Panamá, Emilio Regueira también estuvo en la lista de invitados al escenario, que esa noche se convirtió en un cielo de estrellas.