Representantes de las diferentes actividades económicas del país alertaron sobre las consecuencias que se avecinan si los cierres continúan. Hicieron un...
- 21/11/2019 10:18
Desde hace dos años, la maca (Lepidium meyeni Walp), un tubérculo originario de las montañas de Perú y Bolivia, ha venido revolucionando la comunidad científica, puesto que se le califica como un potente afrodisíaco natural. Y no es para menos, puesto que este vegetal ha sido empleado desde hace siglos por las culturas andinas para mejorar la fertilidad, tanto masculina como femenina.
Pero, ¿qué dice la ciencia? Estudios recientes han demostrado que no se trata de una falacia. Fernando Losa Domínguez, ginecólogo de la Clínica Sagrada Familia de Barcelona, y miembro del Grupo de Interés de Terapias Naturales de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), en su informe Maca y Sexualidad afirma que “la planta favorece el incremento del volumen seminal, la cantidad de esperma por eyaculación y la movilidad espermática”, según publica el diario español El País.
¿Y en la mujeres qué efecto produce? Teresa Ortega, profesora de farmacología en la Universidad Complutense de Madrid, afirmó en el portal Cuidateplus que la maca tiene propiedades adaptógenas, inmunoestimulantes, defatigantes, mejoradoras de alteraciones en la reproducción, incrementa la fertilidad y contribuyen al balance hormonal y, por último, de la memoria. “Esto se debe a la presencia de un tipo de ácidos grasos (macaenos) y sus correspondientes amidas, así como a su contenido en otros principios activos, como alcaloides, abundantes componentes fenólicos (catequinas) y una amplia presencia de vitaminas”, añadió.
Por ahora solo se han realizado estudios con animales y los resultados indican que hay un impacto real en la fertilidad de estos. Este efecto es particularmente notorio en las hembras, ya que la maca estimula el aumento de la hormona luteinizante en la glándula pituitaria cuyas funciones incluyen controlar la ovulación y la maduración de los folículos, promoviendo la fertilidad.
Un estudio realizado por Dording en 2004 (A double-blind, randomized, pilot dose-finding study of maca root (L. meyenii) for the management of SSRI-induced sexual dysfunction), indica que el extracto de raíz de maca peruana no entiende de género. Tiene un efecto “unisex”, publica el diario digital español Ecotierra.
Al respecto, Eliécer Pérez Rivera, psicólogo y terapeuta de pareja y familia, añade que esta planta antes de que sus propiedades fueran investigadas, ya era reconocida por sus poderes afrodisíacos.
“Gracias a la fama de que esta raíz posee propiedades que aumentan la fertilidad y mejoran la libido, en Panamá tanto hombres como mujeres la consumen”, reconoce.
“Además de apoyar el equilibrio hormonal, la riqueza mineral de esta planta ayuda a mejorar el bienestar mental, previniendo y reduciendo los síntomas de depresiones y ansiedad. Esta combinación de factores, junto con su poder afrodisiaco, aumenta la libido y reduce el estrés y todas las demás preocupaciones en cuanto a la disfunción sexual”, resalta el psicólogo.
Sin embargo, muy a pesar de las evidencias científicas recientes, es necesario seguir investigando acerca de las propiedades de esta planta antes de poder llegar a conclusiones o realizar recomendaciones, zanja Rivera.
Investigaciones científicas han demostrado que la maca se encarga de regular los niveles hormonales en el hipotálamo y las glándulas suprarrenales. Estas glándulas, a su vez, activan los ovarios, tiroides y páncreas para fortalecer su funcionamiento, además de producir un número normal de hormonas.
Durante la pre-menopausia (el estado de transición a la menopausia), la maca ayuda a equilibrar, a modo preventivo, el balance hormonal. Por ejemplo, si el estrógeno es el dominante, la maca incrementará los niveles de progesterona para que las hormonas encuentren un punto de equilibrio.
Además, el consumo de maca en esta etapa ayuda al sistema endocrino a mantenerse saludable, lo que contribuye a aliviar los efectos de la menopausia como los sofocos de calor, motivados por los desbalances hormonales. Durante la post-menopausia aumentar los niveles hormonales a un estado post-menopáusico más saludable, además de prevenir la osteoporosis (gracias a su gran cantidad de calcio) ya que la descalcificación ósea en esta etapa está muy acentuada.
La maca es un adaptógeno, ayuda al cuerpo a adaptarse a las situaciones de estrés, aumenta la capacidad del cuerpo para defenderse contra el debilitamiento físico y mental. Se trata de un superalimento rico en minerales (calcio, fósforo, magnesio, potasio, hierro, selenio y zinc), vitaminas (B1, B2, C, E), nutrientes y fitonutrientes.
La maca es fácil de incorporar a la dieta. Puede tomarse como un suplemento o agregarse a batidos, platos de cocina, barritas energéticas. Aunque la dosis óptima para uso medicinal no ha sido científicamente establecida, se recomienda a las personas ingerir entre 1.5 y 5 gramos por día.
Se puede encontrar maca fácilmente en algunos supermercados, farmacias y en tiendas online en forma de polvo, extracto concentrado en cápsulas o como extracto líquido; cualquier formato brinda grandes beneficios.
Actualmente, Perú es el primer exportador mundial de maca. En 2015, exportó maca fresca por un valor de $6.6 millones y tuvo una producción récord de 58 mil toneladas, según el Ministerio de Agricultura. Las principales regiones productoras son Pasco, Junín y Huancavelica.
Sin embargo, es necesaria una mayor investigación para constatar la potencialidad y usos medicinales de la maca que permitan, además, abrir nuevos mercados. Eso es, precisamente, lo que un equipo de científicos peruanos se ha propuesto hacer mediante la conformación de un círculo de investigación sobre esta planta.
Pedro Cieza de León, el conquistador español, fue el primero en describir la maca en su tratado 'La Crónica general del Perú', en 1553, donde hace mención de esta planta.
La maca andina se asemeja mucho a un rábano en forma, sin embargo, es ligeramente más grande en tamaño. La raíz es de tres a seis centímetros de ancho y 4.7 centímetros de longitud. Se consumen cocidas o disecadas al sol y convertidas en polvo.
Se cultiva a una altitud de 2,700 a 4,300 metros sobre el nivel del mar, y ha sido cultivada en los Andes peruanos durante casi 2,600 años.
Los indígenas usaban la maca no solo como afrodisíaco, sino también como una potente hierba para curar muchas enfermedades.
La combinación de rayos solares muy fuertes (debido a la proximidad al ecuador), bajas temperaturas y una altitud importante explican las extraordinarias propiedades de esta raíz, que solo crece en tales condiciones. La maca se siembra de septiembre a noviembre (comienzo de la temporada de lluvias) y se cosecha entre mayo y julio.