El toque de juventud

T emida por todas, evitada por muchas. Sin duda alguna la pérdida de la juventud es un tema que preocupa a las mujeres debido a que los signos del envejecimiento resultan más visibles en el rostro que en cualquier otra área de nuestro cuerpo. Sin embargo, el rejuvenecimiento facial es el mejor aliado para combatir esto, pues brinda una variedad de tratamientos capaces de contrarrestar las diversas fuerzas que actúan en detrimento de su rostro.

Conviene señalar que no se puede hablar de las soluciones para lucir un rostro joven sin antes conocer algunos de los factores más comunes que ayudan a acelerar el envejecimiento. Entre estos se puede mencionar la continua exposición al sol, los cambios hormonales, la disminución en la producción de colágeno, el tipo de hábitos diarios en términos de cuidado de la piel, la dieta, el ejercicio, el tabaquismo, entre otros.

Eterna juventud

Existen muchas formas para lograr el rejuvenecimiento facial, desde la cirugía plástica la cual puede transformar dramáticamente la apariencia de la cara hasta los tratamientos estéticos no invasivos utilizados para mejorar las imperfecciones faciales. Respecto a estos últimos, la dermatóloga Martha Martínez destaca la intradermoterapia facial. Este tratamiento consiste en ‘la administración de sustancias o productos que ayudan a restaurar y estimular la piel permitiendo que ésta luzca más luminosa. También contribuye al retraso de las arrugas’, explica la dermatóloga.

Según Martínez, este método se realiza mediante microinyecciones intradérmicas que se aplican en el área afectada, logrando así una mayor eficacia de la aplicación. Las sustancias que se suministran varían de acuerdo al problema que presente cada persona y las mismas deben ser determinadas por un especialista. ‘Algunos productos que se pueden inyectar son la vitamina C, el silicio, el magnesio y el

ácido hialurónico, que es una sustancia para la nutrición de los tejidos’.

Por otro lado, el Thermage es un método no invasivo que permite la renovación del contorno facial y fibras de colágeno más saludables para lograr una piel más firme. En este procedimiento se aplica una cantidad controlada de energía de Radio Frecuencia Capacitiva (RFC) que produce un calentamiento profundo y uniforme sobre la piel. Esta acción genera que las estructuras profundas de su piel se afirmen y el cutis tenga una apariencia más lisa y juvenil. La reafirmación empezará a aparecer gradualmente entre los dos y seis meses.