Al rescate de lo nuestro

Muchos artistas panameños se han inspirado en nuestro folclor para plasmar en sus obras las costumbres y tradiciones del pueblo. Tal es el caso de Shoshana Levy y Efraín González, amantes de la cultura y defensores de las raíces panameñas, que unieron esfuerzos para publicar el libro gráfico Polleras de Panamá, dedicado a exaltar el trabajo de las artesanas que con sus manos crean la elaborada vestimenta de la mujer panameña en sus fiestas tradicionales y la labor de los orfebres que trabajan las finas joyas que complementan el traje típico femenino.

La idea principal de libro, su concepto y creación, nacen de la inquietud de Efraín González por encontrar documentos que aporten referencias gráficas sobre la pollera. Fotógrafo de profesión, González explicó que la necesidad de mostrar gráficamente la riqueza cultural de Panamá, fue uno de los motivos que lo llevó a realizar una investigación que le permitiera mostrar los detalles de las cadenas, y las labores, formas y colores de las diferentes polleras de lujo y gala y resaltar por medio de la fotografía la elegancia y donaire de las panameñas que los lucen.

Su compañera de aventura, la comunicadora social Shoshana Levy, explicó que el trabajo está dedicado a quienes aman la cultura, a las artesanas que confeccionan la pollera, a los orfebres que fabrican las prendas, a los conocedores del folclore y a quienes estén interesados en conocerlo.

‘Con el libro se pretende dejar a las futuras generaciones un legado sobre el patrimonio cultural del país’, comentó Efraín. ‘Al mismo tiempo es un documento que deja plasmada la esencia de los aderezos de la pollera, tal como se elaboraron, para que dentro de treinta o cuarenta años pueda servir de ejemplo a quienes busquen referencias sobre el traje típico que engalana a la mujer panameña’, agregó el fotógrafo.

El trabajo que minuciosamente realizó este par de amantes del folclor, muestra los diferentes tipos de polleras, tanto en estilos como en confección, que van desde las de lujo – marcadas, caladas, talco en sombra, talco al sol y encajonadas –, hasta las de gala y las montunas. También permite apreciar las diferentes cadenas que forman parte de la vestimenta como el rosario, la cadena chata, el escapulario, el monedero, la Guachapalí, la Cola de Pato, la gargantilla , además de los zarcillos y el tradicional juego de peinetas.

Igualmente han sido incorporadas imágenes de enaguas, zapatos, gallardetes (cintas), las diferentes clases de tembleques que adornan la cabeza de las empolleradas y que simulan un jardín de flores, rebozos y abanicos que complementan la vestimenta típica.

Con el mínimo equipo, sin la escenografía y sin iluminación para una sesión fotográfica, Efraín recorrió todos los encuentros folclóricos que se llevan a cabo durante el año en las diferentes provincias, para retratar las variadas polleras que se aprecian en el libro.

Pero además de conseguir las mejores fotos en festivales como el de la Mejorana, el Festival Nacional de la Pollera y los desfiles folclóricos, el verdadero trabajo, de acuerdo con Efraín, fue hacer el montaje posterior de cada toma para crear un ambiente adecuado que permitiese resaltar las labores y colores de la pollera. Adicionalmente plasmó en una secuencia fotográfica el delicado y detallado trabajo de los orfebres al confeccionar las prendas típicas.

LA PUBLICACIÓN

Shoshana Levy y Efraín Gómez impresionaron a Panamá cuando hace 3 años y tras cientos de horas de trabajo lograran la publicación del libro Polleras de Panamá. El libro, de tapa dura y sobrecubierta plastificada, cuenta con 160 páginas y más de 200 fotos a todo color, fue impreso en Colombia bajo el amparo de la compañía Editart, encargada de imprimir las 500 copias con las que salió al mercado panameño. El contenido está dividido en tres secciones identificadas con cada uno de los colores de la bandera. Mientras sus primeras páginas contienen imágenes de la pollera blanca o de gala y resaltan la finura de las telas con que se confeccionan, en la segunda sección los rojos y azules de las polleras marcada y calada completan el emblema tricolor panameño. En las últimas páginas, resaltan en un fondo negro las doradas prendas que completan la vestimenta.

La colección fotográfica fue complementada con la investigación bibliográfica de Jorge Kam y con los sencillos textos de Luz Lescure encargada de la parte escrita del libro, que en dos idiomas (inglés y español) explica la historia del traje típico.

Una de las quejas de estos ‘quijotes de la cultura’, tiene que ver con la falta de apoyo de las numerosas instituciones, tanto públicas como privadas, que fueron requeridas para sufragar los gastos de impresión del libro, lo que determinó que ambos costearon con sus propios bolsillos el proyecto. ‘Los costos de la publicación sobrepasaron la suma de mil 500 dólares, sin contar con el invaluable trabajo fotográfico de Efraín’, puntualizó Shoshana.