El reino del descontrol

L entejuelas, poca ropa, máscaras, plumas, pedrería, pelucas de colores, tangas minúsculas, maquillaje, kilómetros de piel expuesta, música estridente, canciones desentonadas, alegría, contoneo salvaje, sensualidad, alcohol abundante, comida, sexo y excesos de todo tipo. Mezcle bien todos esos ingredientes, sírvaselo como prefiera y tendrá el mejor carnaval que haya podido imaginar. Y casi sin variaciones – salvo por la poca o mucha ropa de acuerdo al clima – un modelo de carnaval que es común al mundo entero. Uno que puede usarse tanto en Berlín, como en Río de Janeiro, en Oruro, en Venecia o en Panamá. +3D