El índice de Confianza del Consumidor Panameño (ICCP) se situó en 70 puntos en junio pasado, con una caída de 22 unidades respecto a enero de este año,...
- 22/10/2011 02:00
La complejidad de las relaciones humanas está supeditada al desacuerdo, desde la interacción madre e hija hasta los esposos que llevan 50 años de casados. Siempre hay baches en el camino hacia el amor: conflictos, discusiones, intolerancia y breaks (separaciones durante un tiempo prudente), así como momentos donde reina la calma y la felicidad. Estás bien, te sientes bien, tu pareja está bien, pero piensas en otra persona. Analizas las causas y eres consciente de que el amor no se ha acabado, de que no estás dispuesta a romper con tu novio o marido, de que lo amas más que a nada y que él también parece demostrarte lo mismo. Entonces, ¿qué pasa?¿Por qué te carcome la traviesa idea de tener una aventura? Y además, ¿por qué te sientes tan culpable? Estás atravesando por una etapa de infidelidad emocional. Identifica el problema, trátalo y no cometas errores que pueden constarte caro.
Señales de la infidelidad
•Estás atrapada en la rutina: Te sientes cómoda con tu vida, con tu relación y los embrollos con tu pareja no parecen ser muy distintos a los de otras. Sin embargo, sientes que la cotidianidad ha arruinado la chispa que te hacía sentir maripositas en el estómago. Culpas al monstruo de la rutina: ni siquiera tienes que convivir con tu pareja para que te aburras de las mismas salidas. Quieres revivir la emoción de tiempo atrás.
•Tienes miedo de estar aferrada en una relación: Aunque sabes que estás en una relación, sientes que tu eres la ausente, que tal vez la dependencia te tiene amarrada a otra persona. Ya no ves tu relación como un goce sino como una imposición y te aterra pensar que vas a vivir de esa forma el resto de tus días. Por eso tu mente busca métodos de escape, aunque no pasen de la imaginación y las suposiciones.
• Fantaseas constantemente con otros: Tú líbido se ha activado, y no es precisamente hacía tu novio o esposo. Amigos especiales: Promueves la intimidad sexual y emocional con amigos o personas cercanas que te atraen.
Soluciones
• La mejor salida es el diálogo de frente y sincero con tu pareja. Dile lo que sientes que está mal entre los dos, lo que esperas de la relación y los miedos de tu corazón.