‘Ahora la gente entiende el arte contemporáneo'

Para el curador de arte Johann Wolfschoon, el reto más grande en la escena panameña ha sido que el público entienda el arte contemporáneo.

Desde hace diez años, Wolschoon dirige la galería de arte Diablo Rosso, donde se inauguró el pasado miércoles la colectiva ‘Irremediablemente cotidiano'.

‘Panamá estaba muy acostumbrada a la pintura, pero el arte es mucho más que eso', dice el curador, en entrevista telefónica con La Estrella de Panamá .

Wolfschoon curó la muestra que exhibe hoy Diablo Rosso, con obras de Adriana Martinez, Akira Ikezoe, Brandon Cannon, Donna Conlon & Jonathan Harker, Evan Robarts, José Olano y Rodrigo Hernández.

Harker y Conlon participan con un video titulado ‘Lotería', que trata sobre cómo nuestra existencia está basada en el azar entre la vida y la muerte.

‘Si estás acostumbrado a ver televisión y cine, entender el video como arte es complicado', menciona Wolfschoon, refiriéndose al cambio de visión del público.

Pero cuando estas obras entran a colecciones de museos internacionales —continúa el curador— de alguna manera se legitima la calidad de la pieza y la gente entiende que el arte que se muestra reúne ciertos estándares.

Las obras de Conlon y Harker, en particular, forman parte de las colecciones del Solomon R. Guggenheim Museum, del Tate Modern, de la Queensland Art Gallery, de la Kadis Art Foundation y el Centro Gallego de Arte Contemproáneo.

LO QUE INFLUYE HOY AL ARTE

‘Hoy el arte está influenciado por temas políticos y de activismo social, pero también hay mucha preocupación por nuestro día a día, enfocado en el uso de objetos cotidianos para tocar temas sensibles', explica Wolfschoon.

Todas las obras de la muestra ‘Irremediablemente cotidiano' están basadas en cosas cercanas a la vida diaria.

El video ‘Lotería', por ejemplo, está hecho con balotas de lotería para plantear que muchas personas depositan su futuro en el azar.

Esta exhibición colectiva estará abierta al público hasta finales de abril en Diablo Rosso, ubicado en el Casco Antiguo, y forma parte de las dos exposiciones grupales que lleva a cabo la galería a lo largo del año.

EL ARTE JOVEN SE EMPODERA

Recientemente, abrió el espacio Lupa en el Casco Antiguo, una iniciativa de Diablo Rosso dirigido por Ingrid Cordero con la intención de apoyar a la escena de artistas jóvenes que no tienen un lugar dónde exhibir sus obras.

La galería Diablo Rosso cumplió una década desde su apertura en octubre de 2016. Su director, Johann Wolfschoon, menciona que el mayor reto —y logro— ha sido la creación de públicos.

ARTISTAS

Son los que participan en la muestra que exhibe hoy esta galería bajo el título ‘Irremediablemente cotidiano', que inauguró el pasado miércoles y estará abierta hasta finales de abril.

No obstante, Wolfschoon advierte que su trabajo en las galerías es por convicción, por devolverle algo al país.

‘La galería de arte no es un negocio. Solo genera ingresos para autosostenerse, pagar nuestra participación en ferias de arte y alquilar el espacio', dice el curador y también arquitecto.

Entre en broma y en serio, él describe a Diablo Rosso como ‘una galería comercial sin fines de lucro', pero existen iniciativas de arte joven que le motivan, como el espacio de fotografía Antítesis (Bella Vista) y Temporal (Casco Antiguo).

‘Unas chicas se unieron e hicieron Arte Nómada y tienen un espacio que se llama Temporal en el Casco Antiguo. Estos lugares así, autogestionados por artistas, son en el mundo los más interesantes. Les envidio muchísimo la energía que tienen', concluye Wolfschoon.