'El cantar de las creaturas', una obra que honra a los fallecidos en pandemia

“Hice una obra dedicada a todos los que han perdido lastimosamente la vida en la pandemia que ha afectado a Panamá y al mundo entero”, expresó el maestro del arte contemporáneo panameño Aristides Ureña Ramos, quien presentó este domingo su obra titulada 'El cantar de las creaturas', en memoria de las víctimas caídas a causa de la covid-19, en la iglesia San Francisco de Asís del Casco Antiguo de Panamá.

Su arte, abierto a todo público, está plasmado en una tela retablo de más de tres metros que se desveló en horas de la mañana, donde acudieron autoridades gubernamentales, eclesiásticas, diplomáticos, entre otros asistentes.

Esta nueva entrega lleva como tono predominante el azul, un elemento que caracteriza y sella el proceso artístico del pintor panameño en sus obras.

“Mis obras las pintó en azul porque me identifico con este color y también porque Panamá está rodeado de dos mares. Esto forma parte de mi utopía como pintor”, dijo.

En el mural se aprecia la figura principal de san Francisco de Asís, elementos como la flora y la fauna nacionales, el retrato de Jesús en la cruz, la bandera, la virgen, personas orando con mascarillas, calaveras y en un pequeño espacio se aprecian personas tocando algunos instrumentos.

“Esta es una obra que resguarda las características y la esencia de lo que es Panamá, refleja una pequeña parte de cómo ha sido la pandemia en el país, un tiempo difícil para todos los seres humanos”, expresó.

La obra de Ureña está instalada en una pared interna de la iglesia San Francisco de Asís, con 3.90 m de ancho, por 5.61 m de alto.

Fue pintada en resina acrílica, sobre tela de algodón mixto de lino, que fue traído desde el exterior. La tela llegó en las primeras semanas de enero de 2021. Es decir que la superficie total de la obra es de 13.86 metros cuadrados.

Indagando sobre el proceso creativo del maestro de la plástica, nos contó que más allá de la realización, lo que más le tomó tiempo fue crear el concepto para plasmar el resultado logrado.

“Tenía que representar gráficamente la expresión de la memoria de los hermanos caídos en la pandemia y, siendo la obra montada en la iglesia de San Francisco de Asís ya tenía un punto de referencia”, expuso, y agregó que otro de los aspectos que le sirvió como inspiración para hacer este trabajo fue su viaje a Florencia, Italia, donde se documentó previamente para sacar adelante esta obra. “Recorrí Florencia, Roma, Bruselas y Brujas viendo cómo los distintos artistas enfrentaban a través de su arte el tema de la pandemia, y cómo a través de los altares de las iglesias de estos sitios se le agradecía a Dios tras atravesar gruesas pandemias en el pasado. Hice una investigación rigurosa por cinco meses”.

Ureña califica su trabajo con un estilo propio y veloz, y detrás de este se mantiene un amplio proceso de documentación que sustenta un arduo trabajo.

En cuanto a la obra, tuvo la aprobación de monseñor José Domingo Ulloa, con el propósito de exaltar los valores de solidaridad cristiana, en medio de la pandemia, un episodio clave en la historia para honrar a los fallecidos en medio de la crisis sanitaria.

La obra también busca evidenciar los pasajes históricos del pensamiento franciscano, a través de la interpretación de 'El cántico de las creaturas' en esta pandemia. “Aquí quise exaltar de manera sobria la obra de san Francisco y la relación católica en 'El cántico de las creaturas' sobre el concepto de la muerte y la resurrección eterna”.

Representantes de la Iglesia durante la presentación de la obra agradecieron al artista por haber dejado un testimonio “inequívoco de su irrenunciable fe y dedicación al prójimo”, también agradecieron su aporte en un momento histórico, donde “se necesita remarcar con mayor énfasis la contribución de nuestros mejores intelectuales”.

“Quiero agradecer a la Curia Metropolitana de Panamá porque no me puso ningún tipo de censura para efectuar esta obra”, expresó el pintor panameño que cuenta con el permiso del Vaticano para pintar en las iglesias tras una preparación que recibió en los años que residió en Florencia, Italia.

Con esto, Ureña deja un legado de alto valor artístico que contribuye al fortalecimiento de la cultura en el país.