Coiba sacude el mundo científico

PANAMÁ. Las prístinas aguas del Parque Nacional Coiba son un santuario biológico. Un nuevo hallazgo en los cálidos mares de la reserva panameña demuestra que esconde tesoros ecológicos que aún no han sido descritos por la ciencia.

Hace tres meses en este patrimonio de la humanidad se encontró alrededor de cuarenta y cinco compuestos con propiedades medicinales. Ayer, nuevamente Coiba se convirtió en noticia. En esta ocasión por el descubrimiento de una nueva especie de coral en aguas poco profundas. La revelación pone en evidencia el potencial para la investigación científica que tiene este sitio y la importancia de su conservación como legado para la humanidad.

El edificio submarino de Coiba fue nombrado Pacifigorgia marviva. El nombre fue otorgado por Héctor Guzmán, científico del Instituto de Investigaciones Tropicales Smithsonian (STRI) y la investigadora asociada a STRI, Odalisca Breedy, en el Journal of the Marine Biological Asssociation of the United Kingdom, en honor a la gran labor realizada por la fundadora de MarViva, Erica Knie, por su pasión y compromiso por los océanos.

La nueva especie pertenece a la familia Gorgoniidae y fue encontrada en el Pacífico panameño a unos 35-40 metros de profundidad. Su distribución parece ser restringida, explicó Guzmán, quien se lleva el mérito de haberla descubierto. El Pacifigorgia marviva se caracteriza por tener colinas erectas entre blanco y crema, que tienen entre una y tres ramas.

El científico afirmó que es comparada con otras que se encuentran en el Pacífico oriental. Agregó que este descubrimiento aumenta el número de especies Pacifigorgia a 35 en total —20 de estas especies reportadas para Panamá— lo cual representa el 57 por ciento del género en el Pacífico Oriental Tropical, seguido por Costa Rica y Ecuador, con 14 y 10 especies, respectivamente.

El proyecto fue ejecutado con fondos donados por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, Senacyt.

MARVIVA HABLA

La directora Nacional de MarViva en Panamá, Zuleika Pinzón, indicó que la organización ha venido fortaleciendo la línea de ciencias, colaborando con estudios científicos para lograr indicadores biológicos que permitan monitorear la sostenibilidad ambiental específicamente de los recursos marinos y costeros y la información que apoye en la toma oportuna de decisiones.

Por su parte, el biólogo del STRI Héctor Guzmán concluyó asegurando que la labor de MarViva, en las áreas del Corredor Marino del Pacífico Este Tropical, resulta esencial. ‘MarViva es para mí un vehículo que puede llevar la información científica a todos niveles: ONG, autoridades, empresarios, académicos, las comunidades y otros actores estratégicos. El mensaje que les doy es que continuemos trabajando juntos por los recursos marinos’.