Panamá, la ‘maternidad' de las tortugas marinas amenazadas

Actualizado
  • 17/08/2016 02:00
Creado
  • 17/08/2016 02:00
Lora, verde, baula, carey y cabezona son las cinco especies que llegan a poner sus huevos en las cálidas arenas de las playas tropicales

Entre los meses de junio a marzo, miles de tortugas marinas llegan a las costas panameñas para desovar, después de un largo período migratorio por todo el mundo.

Tras la primera anidación al principio de la temporada, en junio, el próximo desove masivo se registrará entre octubre y noviembre.

Desde épocas remotas, las aguas territoriales del Pacífico y el Caribe panameño se han convertido en la ‘sala de maternidad' de las tortugas marinas, casi todo el año.

Lora, verde, baula, carey y cabezona son las cinco especies que llegan a poner sus huevos en las cálidas arenas de las playas tropicales de Islas Cañas, La Marinera, Guánico Abajo, Tonosí, Cambutal y Bocas del Toro, identificadas como los principales sitios de anidación de los quelonios, pero también los de mayor peligro para la subsistencia de la especie.

Allí, la luna y las estrellas se convierten en cómplices de ese fenómeno natural que no solo ha despertado el interés de los científicos, para estudiarlo sino también el de los cazadores, para exterminarlas. En medio de la oscuridad, las hembras llegan a las costas del istmo panameño, arrastrándose laboriosamente con sus aletas a través de la arena.

Es allí donde los peligros para las madres y los neonatos de los quelonios se acrecientan. A menudo, los cazadores esperan largas horas durante la noche para colectar los huevos, a medida que la hembra intenta depositarlos en un pozo poco profundo que ella misma excava.

COMERCIO DE TORTUGAS

La captura de huevos y tortugas para su venta está prohibida oficialmente en la legislación panameña, pero a pesar de ello el problema no se detiene y ha llevado a las especies al declive.

Las cinco especies existentes en Panamá se encuentran en la lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación Ambiental (UICN) y en el Apéndice I de la Convención Internacional de Comercio Exterior (CITES).

‘El tema aquí no es la falta de acceso a los alimentos o la pobreza en las comunidades costeras, como algunas personas piensan', puesto que ‘una docena de huevos de gallina de alto valor nutritivo cuesta menos de $2; y un solo huevo de tortuga puede llegar a costar hasta 70 centavos o más', señaló Héctor Guzmán, científico del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés).

Los huevos de tortuga, por lo general, se hierven, se ponen en vinagre y se venden en los bares y junto a las carreteras a un costo de entre $25 y $70, como afrodisíaco.

‘Por desgracia, vivimos en una sociedad machista que ve simbólicamente los huevos de tortuga como un potenciador sexual en ciertos estratos culturales y sociales', sostuvo el científico.

La carne de tortuga, por su parte, se comercializa en el mercado negro y se ofrece en algunos restaurante del país. El costo de su carne cruda oscila entre los $2 y $3 la libra, mientras que en los restaurantes, un plato con carne de tortuga puede estar costando entre $8 y $10, subrayó Ábrego.

El caparazón de las especies también es aprovechado para hacer artesanías.

‘Actualmente, las especies de tortugas se encuentran en un grave grado de amenaza por nuestras acciones. El consumo de sus huevos, carnes o partes son la principal amenazas de las tortugas marinas', advirtieron los biólogos Marino Ábrego y Jacinto Rodríguez.

La mayor comercialización de las tortugas marinas se registra en Azuero, Los Santos, Tonosí, Pedasí, y Cambutal. Isla Cañas es el único lugar donde se permite, mediante resolución, la captura de los huevos para subsistencia de los pobladores.

‘La caza furtiva indiscriminada de huevos de tortuga marina tiene efectos devastadores sobre estas especies en peligro', señaló Guzmán.

LA IMPORTANCIA

Las tortugas son responsables de gran parte de la salud y el equilibrio de los ecosistemas marinos y costeros. También están siendo aprovechadas responsablemente por algunas comunidades para el desarrollo del ecoturismo, generando ingresos económicos a familias de escasos recursos.

Rodríguez, de la Fundación Agua y Tierra, señaló que el Ministerio de Ambiente es el punto focal en Panamá en el tema de la conservación de las tortugas marinas.

En los últimos días, se han hecho varios decomisos de huevos de tortugas en la provincia de Los Santos, sin embargo, para Rodríguez, ‘el Ministerio Público ha puesto multas muy bajas'. Las sanciones por daños ambientales pueden pagarse con dinero o con penas de cárcel.

La CITES, de la cual Panamá forma parte, insta a los países a proteger los sitios de anidación de tortugas y a concienciar a la población sobre su conservación. Como parte de esos compromisos, MiAmbiente se encuentra preparando un serie de afiches científicos sobre las tortugas marinas y su importancia para los ecosistemas marinos. De igual modo, un grupo de activistas, de distintos organismos del país está desarrollando la campaña ‘Tortugas para siempre', con la cual buscan involucrar a la poblaciones en la conservación de los quelonios.

‘Tenemos que tomar conciencia de que las tortugas marinas llegan a nuestro país a reproducirse y nosotros como ciudadanos responsables debemos tomar conciencia y no obstaculizar estos eventos para que las especies se puedan mantener', subrayó Ábrego, biólogo de MiAmbiente.

==========

‘La caza furtiva indiscriminada de huevos de tortuga marina tiene efectos devastadores sobre estas especies en peligro',

HÉCTOR GUZMÁN

CIENTÍFICO DEL SMITHSONIAN

==========

INVESTIGACIÓN

Comer tortuga causa daño a la salud

Científicos del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI) y la Universidad de McGill revelaron que los huevos de tortuga colectados a lo largo de la costa del Pacífico de Panamá pueden contener niveles excesivamente altos de metales tóxicos como el cadmio.

Advierten que el consumo de huevos de tortuga podría ser peligroso, especialmente para los niños.

‘Hemos estamos descubriendo que el consumo de huevos de tortuga puede ser perjudicial y ciertamente debe ser tratado como un problema potencial para la salud pública', señaló Héctor Guzmán, investigador del Smithsonian.

Guzman dijo que las personas que se alimentan con carne o huevos de tortugas pueden contener en su organismo metales peligrosos debido a que las tortugas viven en aguas cada vez más contaminadas, así como también las medusas, algas, camarones y otros animales. Los estudios de toxicología para determinar si estos alimentos son seguros son insuficientes.

Para encontrar estos hallazgos, los investigadores colectaron los huevos de dos especies de tortugas marinas, las tortugas verdes ( Chelonia mydas ) y la tortuga golfina ( Lepidochelys olivacea ), en varias comunidades a lo largo de la costa del Pacífico de Panamá.

La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza enumera a las tortugas golfinas como ‘vulnerables' y a las tortugas verdes como ‘en peligro'.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus