Inteligencia erótica, clave para mantener la pasión

La inteligencia erótica consiste en saber cómo manejarse con los demás en el plano sexual y afectivo. Tiene como eje fundamental el manejo de conductas orientadas a despertar el deseo en una relación de pareja estable o para abordar y disfrutar situaciones con una nueva pareja.

El punto neurálgico de este concepto se centra en el deseo sexual (punto de partida de la respuesta sexual humana que desencadena la excitación y termina en el orgasmo y/o la resolución) y en que facilita el desarrollo de una vida afectiva y sexual operativa, así lo define el psicólogo y sexólogo Pedro Rondón Navas en la revista Sexológicas, dedicada a educar y orientar a las personas sobre temas de salud sexual.

Según el terapeuta sexual y de parejas, el entrenamiento en habilidades que permitan desarrollar 'nuestra inteligencia erótica' debe basarse en la búsqueda de información, iniciativa, creatividad, adaptación a nuevas situaciones, apertura al cambio y aprendizajes diversos.

El experto también compartió que en el caso de las relaciones de pareja, es complicado y a veces difícil poder desear lo que ya se tiene.

“Cuando esto sucede, estamos frente a uno de los factores de deterioro en la relación. Al negar que la sexualidad es un elemento importante en nuestra vida, postergamos encuentros y propiciamos desencuentros, dejamos que el deseo sexual se extinga o pensamos que por arte de magia este volverá en el momento menos pensado. Culpamos a los hijos, al estrés, al trabajo, a la estrechez económica, a la familia; no aceptamos que el problema está en nosotros mismos y que se trata de un problema de pareja”, mencionó el sexólogo en la revista.

Mientras que Marty Klein, sexólogo y autor del libro Inteligencia sexual, explicó a la revista española Buena Vibra que “la inteligencia sexual o erótica es la capacidad de despertar y mantener el deseo en una situación complicada o incómoda, y adaptarte a los cambios naturales de tu cuerpo para obtener placer“.

Además, según el experto, “es tener inclinación y la mente abierta para conocer el significado del erotismo, así como entender y aceptar que los momentos íntimos no siempre son como se planean”.

Pero, ¿cuál es la causa de que las relaciones sexuales empeoren en parejas? ¿Se puede desear lo que ya se tiene? ¿Por qué el aumento de la intimidad no se refleja en la sexualidad en las parejas?

En sus 20 años de experiencia, Esther Perel, psicoterapeuta neoyorquina y autora del libro El dilema de la pareja, bestseller del The New York Times, ha tratado a infinidad de parejas que se quejan de que sus vidas se han convertido en monótonas y desprovistas de erotismo: relaciones sexuales que al principio eran íntimas, igualitarias y abiertas, se transforman de un día para otro en aburridas y desapasionadas.

A través de su libro, Perel invita a las parejas a que aprendan cómo evitar que elementos como el estrés, llevar una vida demasiado ocupada o la llegada de los hijos influyan en tus relaciones de pareja, así como también a superar los obstáculos y las inquietudes que surgen cuando la necesidad de una relación estable se enfrenta a la búsqueda de la pasión.

“Inteligencia erótica aspira a atraparte en un debate honesto, informado y provocativo; un libro que te anima a cuestionarte a ti mismo, a que hables sobre lo que normalmente no se habla y a que no tengas miedo de desafiar lo sexual y emocionalmente correcto. Y, sobre todo, un libro para romper los estereotipos sobre el deseo erótico... de casa”, reseña la también autora del bestseller internacional Inteligencia erótica, un fenómeno mundial que se ha traducido a casi 30 idiomas.

De acuerdo con David Barrios, sexólogo clínico y psicoterapeuta de parejas, el erotismo es el fenómeno humano caracterizado por el deseo, la excitación y el orgasmo, acompañado de los fenómenos emocionales, mentales e imaginarios que implica; esto significa que el número y la calidad de los encuentros sexuales y el disfrute de los mismos forman parte de la experiencia erótica.

“Como el erotismo es uno de los aspectos de la vida interior, es importante que en la elección de una pareja las características eróticas tengan puntos de coincidencia para lograr armonía sexual. Por ello, el verdadero erotismo se expresa cuando cada uno trata de comprender al otro, cuando hace lo que le gusta y a su vez hace lo que le gusta al otro”, mencionó Barrios.

Entre las indicaciones que establece el sexólogo Rondón, una de las formas de hacerlo es a través de la búsqueda de información sobre el funcionamiento de nuestro cuerpo y el de nuestra pareja.

Igualmente señaló que hay que tener aceptación y aprecio de sí mismo. “El arreglo personal, la autoaceptación, reflejan ante los demás la imagen de nuestra propia valoración”.

“Debemos aprender a identificar nuestras fuentes de placer y nuestras zonas eróticas y mejorar nuestra creatividad para no caer en la rutina”, comentó a la revista.

También sugirió a las parejas a explorarse para identificarse a sí mismos. “Estar en forma, cuidar nuestro cuerpo, alimentación, imagen personal, evitar los excesos de comida, alcohol y cigarros”, expresó.

“Es necesario desarrollar nuestra inteligencia erótica y aprender a no considerar la sexualidad como la última actividad en la escala de prioridades de una relación de pareja. Aplicar lo que sabemos sobre sexualidad en nuestra vida íntima, puede ayudarnos a recuperar los deseos perdidos”, puntualizó Rondón.