Labitconf 2021: el espacio de aprendizaje internacional sobre cibereconomía

Actualizado
  • 15/12/2021 00:00
Creado
  • 15/12/2021 00:00
La conferencia latinoamericana destaca las últimas tendencias de las criptomonedas y el uso de mecanismos tecnológicos para su integración alrededor del mundo
La conferencia recibió 14 mil visitantes virtuales y más de 4 mil presenciales en El Salvador.

La Conferencia Latinoamericana de Bitcoin y Blockchain (Labitconf, por sus siglas en inglés) fue el espacio internacional en el cual se tocaron temas sobre la implementación de las criptomonedas como monedero viable en el sector comercial y socioeconómico de El Salvador, que es el primer y único país en aceptar el bitcoin como una opción de moneda nacional. La conferencia celebró su novena edición de forma presencial y virtual desde San Salvador, El Salvador, el pasado noviembre de este año.

El evento reunió a muchas de las mentes más inteligentes de la industria de bitcoin, así como a empresarios locales, en un espacio donde se realizaron talleres y conversatorios que buscaron dar un norte al camino de la región frente a los cambios constantes de la cibereconomía actual y proveer de aprendizaje accesible a las personas para su libertad financiera y conocimiento de las criptomonedas.

En este panorama, la cibereconomía se retrata como un entorno basado en la complementación de los monederos digitales a la economía de los países para incrementar su competitividad en la exportación de bienes y servicios de forma global.

Las fronteras de las monedas actuales –que se ven sujetas a desvalorización– se desdibujan ante la incorporación de criptomonedas como el bitcoin, que permitirían un mayor manejo de los procesos de compra y venta, así como el crecimiento del alcance de las empresas en la región latinoamericana.

Labitconf 2021: el espacio de aprendizaje internacional sobre cibereconomía

“Bitcoin tiene sentido como herramienta para saltear las restricciones de diversos países que no manejan el dólar y que presentan dificultades en los sistemas de divisas, haciendo aún más compleja la comercialización con familias migrantes y ciudades pequeñas”, comentó a La Estrella de Panamá, Daiana Gómez, coorganizadora de Labitconf 2021, “por eso nace esta conferencia, como un centro de enseñanza al usuario para acercar al regulador y quitar el estigma de la tecnología en la economía”.

Este año, el tema de la conferencia se centró en el escenario de la adopción del bitcoin como moneda de curso legal en el país anfitrión. “El Salvador es como una postal del futuro, era impensable a inicios de año que pudiéramos pagar un café con criptomonedas, pero con la adopción del bitcoin se ha podido mostrar la importancia de esta transición”, apuntó Gómez, “pero no toda la adopción es la misma, tanto en la capital como en las áreas rurales y periféricas, donde la obtención de una conectividad significativa al internet sigue presentándose como un reto pendiente de atender en el país”.

Más de 14 mil asistentes se registraron de forma virtual y 4 mil ingresaron de forma presencial en El Salvador, además de contar con un día de contenido en español siendo un espacio importante “para que la comunidad latina conozca que hay profesionales en esto, comunicando los temas de urgencia con seriedad”, indicó Gómez.

Labitconf se enorgulleció de ser el primer año en que pudo dar pagos en moneda de curso legal a sus proveedores, contar con talleres abiertos para el conocimiento del bitcoin en la sociedad y tener una mayor participación en el idioma español desde su creación en 2013.

Labitconf 2021: el espacio de aprendizaje internacional sobre cibereconomía
Los retos

Algunas nuevas brechas de exclusión que llegan con la integración del bitcoin se evidencian en la falta de conectividad de banda ancha, así como en la posesión de dispositivos inteligentes que promuevan el uso con mayor accesibilidad y sencillez. Además, la educación financiera y tener expectativas razonables es una necesidad para que todo posible usuario conozca realmente el razonamiento detrás de la nueva moneda y cómo se utiliza globalmente; esto seguido de la prudencia con la integración de las criptomonedas y su dependencia en las economías.

“El bitcoin está actualmente en el mismo escenario que estaba el internet en 1990 cuando no sabíamos exactamente cómo funcionaban sus protocolos, por lo que estamos atravesando un panorama de evolución y aprendizaje con un sistema que puede variar en cualquier momento, pero que muestra beneficios”, añadió Gómez.

La economía del futuro

Gómez señaló que si bien el bitcoin es considerado “la economía del futuro”, ella lo llama la “economía del presente”, porque es “la construcción del valor del presente lo que va a determinar el futuro y cómo nos vinculamos”.

La evolución de esta moneda se encuentra en un camino de actualizaciones constantes, dado que su comparación comercial con otros métodos de cibereconomía como pagos digitales a través de Visa o Mastercard se mantiene en “una baja rapidez de transacciones”, según apuntó la experta en cibereconomía.

“Auguro un futuro en el que la gente no sepa que está usando bitcoin aunque lo esté haciendo, que sea una inclusión orgánica que permita a las personas la programación de la ejecución de sus pagos y transacciones digitales de forma completamente remota, a través de dispositivos inteligentes”, anotó Gómez.

Esto, aunado con la esperanza de una mayor aceptación en las regulaciones socioeconómicas de los países de la región, es un camino que se pavimenta con una mayor educación en la economía digital. Para Gómez, el avance de la aceptación de las criptomonedas en un espacio socioeconómico global que partirá con “la inclusión de esquemas de aprendizaje y valorización de los beneficios de esta tecnología” y una menor “estigmatización sobre lo que significa controlar nuestro dinero de forma digital”.

En el caso de El Salvador, la inclusión del bitcoin representa un apoyo para las nuevas tendencias tecnológicas que pueden ser de ayuda para el empuje del país. “La realidad de El Salvador es particular, porque no tiene una moneda propia desde 2001, así que se utilizaba el dólar estadounidense principalmente; esto no significó un gran cambio al pasar a utilizar una moneda emitida por un software, pero las condiciones legales que permiten este cambio y la protección de su economía son muy difíciles de replicar en otro país”, explicó Gómez.

“Una regulación que permita restricciones de ingresos es perjudicial, porque esta herramienta necesita aire, poder expandirse y ser utilizada lo más posible para entenderla, aún más en un ecosistema que está en crisis”, como la economía mundial tras la pandemia.

Entre las ventajas de esta economía digital del futuro, Gómez indicó que la intergeneracionalidad es un espacio en el que puede crecer y dar más oportunidades de integración laboral a las generaciones jóvenes que “nacieron conociendo el mundo digital”.

“Su utilización en videojuegos la hace apta para entender este ecosistema (...) En la conferencia dimos espacio a más de 500 jóvenes interesados en aprender sobre cómo con un poco más de especialización y tiempo pueden obtener grandes posiciones en el mercado de la programación y la minería de criptomonedas, porque será algo de gran demanda a partir de 2022”.

Desde las perspectivas de Gómez, Latinoamérica se enfrentará en los próximos años a mayores oportunidades de aprendizaje, inclusión, promoción y aceptación de las nuevas tecnologías económicas, sin embargo, se deben atender las brechas de conectividad, educación y visión gubernamental para aprovechar los beneficios de la cibereconomía en su totalidad.

“Las nuevas generaciones pueden participar activamente en la construcción de esta infraestructura tecnológica, aportando ideas, siendo curiosas y creativas, además de seguir indagando para crear espacios de convergencia intergeneracional que abran debates comunicacionales sobre lo que se necesita para hacerlas llegar a más rincones y proveer un espacio de uso regulado en la región”, enfatizó.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus