Allen Iverson está considerado para el Salón de la Fama

Tal vez muchos amantes del baloncesto recuerden que Allen Iverson fue uno de los mejores jugadores de la NBA en su posición, y además, de aquellos canasteros que han sido seguidos por una gran cantidad de fanáticos y admiradores.

Iverson figura entre los elegibles para ingresar al Salón de la Fama de la liga en septiembre del próximo año, una poderosa clase que podría incluir a Shaquille O'Neal, Yao Ming y Sheryl Swoopes, una de las pioneras del baloncesto profesional femenino en los Estados Unidos.

El primer pique de 1996 por los 76ers de Filadelfia, terminó con 26.7 puntos promedio por partido, 6.2 asistencias y un impresionante promedio de 41.1 minutos por partido, a lo largo de 17 temporadas.

Cual jugador del barrio, Iverson impuso ese estilo del canastero sin temor de atacar el aro ni de lanzar a larga distancia; nunca dejó que algo o alguien lo intimidara y se distinguió por no dar tregua.

Es posible que por jugar en los 76ers, un equipo donde él era todo, sin acompañamientos de alguna figura que le permitiría tomar algún descanso, el trabajo de Iverson no se haya destacado más allá de los números individuales, que le valieron para ser incluido once veces en el Juego de Estrellas.

Su mejor temporada fue la del 2001, cuando coronó con el premio al Jugador Más Valioso de la NBA, donde anotó 31 puntos por partido y prácticamente devoró la liga.

Los finalistas del Salón de la Fama serán anunciados durante el fin de semana del Juego de Estrellas en febrero de 2016 y los exaltados el 4 de abril en Houston.