No juegue con la palabra empeñada

Hace unos tres años, Hernán Darío Gómez visitó las instalaciones del Grupo GESE, trayendo un discurso ‘vendible y comprable'.

‘El objetivo es llevar a Panamá por primera vez a un Mundial; ese es el compromiso que tenemos. Lo que salga en el camino, bienvenido sea'.

Fue su premisa, y la ha sostenido a través del tiempo.

La verdad es que yo le creo; pero veamos algunos detalles.

México sufrió dos derrotas que para sus especialistas, ‘mancharon la reputación del balompié mexicano' en manos de Juan Carlos Osorio, el técnico nacional y que, igual que Gómez, es colombiano. Que sean paisanos no tiene nada que ver. Se trata de formas de hacer las cosas.

Osorio tiene a todo el país respirándole en la nuca, por fallar en la Copa Confederaciones y perder ante Jamaica en la Copa Oro, Lo persiguen los insultos y diatribas del aficionado común y del que más sabe; a pesar de eso, la federación del país le mantiene el endoso al frente del ‘Tri'.

A ‘Bolillo' no lo acosan, ni insultan; porque los panameños no somos malcriados; pero sí nos damos cuenta de lo que pasa. En el trayecto a Rusia 2018, no ha ganado nada; salvo un tercer puesto en Copa Oro de 2015, como destacable.

En la Hexagonal tiene 7 puntos, y 12 por disputar; seis de ellos ante México y Estados Unidos de visitante. Si quiere que la palabra empeñada tenga algún valor, estimado ‘Bolillo', haga válido su vaticinio, y ya no ofrezca más excusas. Se lo agradeceremos, muy sinceramente.

OPINIÓN DEL EDITOR