Los temas sobre la mesa

Nueva semana y los tópicos han llegado a la mesa de redacción desde donde he optado por explicar cada uno de ellos. El primero, y como ya sabrán, es que Argentina y Colombia albergarán la Copa América del próximo año. Sí, ambos países serán las sedes de la competición sudamericana pero, ¿para qué?

El propósito de la CONMEBOL para realizar esta maniobra es, según su propia determinación, el de acercar los juegos del torneo a la mayor cantidad de ciudades vecinas, por lo que crearán dos grupos: el Norte y el Sur (yo también pensé en Game of Thrones). A partir de allí las selecciones del Norte tendrán la oportunidad de competir más cerca de su país al igual que las del polo opuesto.

La idea busca que más aficionados acudan a los cotejos, así de simple. Si la Copa se desarrollara únicamente en Colombia habría afición en desventaja para su traslado, tal como la uruguaya, que ni imaginar los trayectos para llegar al destino final. Y claro que lo que acabo de decir es un problema que siempre ha existido, solo que ahora han optado por buscar una alternativa que parece podría funcionarles.

Ahora bien, otros que no estarán con el vuelo tan alegre son los del Real Madrid pues, además de quedarse sin aspiraciones en toda competición, la Liga ha decidido programar su siguiente juego en el peor horario posible: el lunes 15 de abril, un día en donde uno decide si ve el ‘gran choque' de la jornada o una película cualquiera.

Normalmente los partidos que se disputan los lunes son los de menor importancia para la competencia, debido a que no interesa si los equipos ganan o pierden, podría decirse que se juegan porque existe un calendario y varias obligaciones, pero no porque luchen por algún motivo. Y menos los merengues.

Después de darle la vuelta al Eibar el sábado pasado, tendrán que esperar nueve días para volver a accionar en el césped y, en éste caso, de visitantes ante el Leganés que pelea la media tabla (porque también se lucha) junto con la Real Sociedad, el Eibar y el Espanyol. Ahora entiendo porque será esa fecha.

Ya para concluir, quisiera tomar el último tema de mi mesa, el que tiene el nombre de Joaquín Caparrós. Brevemente explicaré la situación para quien no la haya concebido aún: el pasado fin de semana el timonel español anunció en rueda de prensa que padecía de leucemia, sin embargo, la detección ha sido muy a tiempo por lo que no necesita tratamiento, según su propia declaración.

Las letras nunca serán suficientes para demostrar el apoyo y la sincera palmada que la gente ha querido brindar al actual técnico del Sevilla, y espero que estas líneas sean consideradas como un soporte sensible y desinteresado, pues a pesar de que el estratega ha mencionado que no volverá a hablar del tema, desde esta significativa rebanada del mundo quisiera compartirle mi respeto absoluto a la decisión tomada.

Por más desconocido que pudiera leerse mi fundamento, es de humanos apreciar el valor y el coraje de una persona que enfrenta una lucha como tal. Todavía le queda flamenco por disfrutar y él lo sabe. Un honor escribir, entre otras cosas, de la valentía expresada en estos que fueron los temas sobre la mesa.